El aval de la tradición olímpica

Londres cuenta con la tradición olímpica como principal aval para la organización de los Juegos de 2012, junto a las infraestructuras y el apoyo de figuras del deporte tan dispares como el futbolista del Real Madrid David Beckham, el mito del remo Steve Redgrave, y los atletas Cathy Freeman o Jonathan Edwards. La capital británica, al igual que París, ya albergó en dos ocasiones la cita olímpica, en 1908 y 1948, y es contemplada como la cuna de distintos deportes. Sin embargo, a pesar del favoritismo inicial que parecían atribuirle desde el propio COI las dudas del propio Ejecutivo británico han jugado en su contra. Hasta en tres ocasiones se aplazó la presentación de su candidatura a la espera de recibir el apoyo del Ejecutivo, lo que causó cierto resquemor dentro del movimiento olímpico. El temor a que una candidatura conduzca al país hacia una espiral de construcción sin un fin de los plazos, retrasos y exceso de costes provocó el recelo del Gobierno de Tony Blair que, finalmente, apostó por el apoyo al proyecto. Así deportistas británicos como Sir Steve Redgrave, Kelly Holmes, Jonathan Edwards y Amir Khan apoyaron públicamente la candidatura. El presupuesto de la candidatura, en caso de salir victoriosa, ascendería a 2.375 millones de libras (más de 3.500 millones de euros), de los que 875 millones se financiarían por un aumento del 20 por ciento de los impuestos locales en Londres, mientras que la lotería inglesa generaría 1.500 millones de libras (2.340 millones de euros). Londres debería destinar más de 2.000 millones de libras a la rehabilitación del barrio de Stratford, al este de la capital, donde se ubicarían las principales instalaciones deportivas. Aunque a la candidatura le salen las cuentas. Según las primeras estimaciones del Gobierno inglés, los Juegos pueden arrojar unos beneficios que oscilen de los 80 a los 140 millones de libras, una vez incluidos los ingresos televisivos y de marketing. El líder de la candidatura, Lord Coe, prometió, sin embargo, «los mejores Juegos de la historia» porque «ofrecerá lo prometido a tiempo y gastando el dinero prometido». Su filosofía es que su atención se enfoca en la próxima generación. Asimismo, su promesa consiste en que «los Juegos Olímpicos transformarán la ciudad, regenerando las partes más pobres de Londres a la vez que se utilizará la belleza y la sofisticación que ya tiene esta gran capital del mundo». «Vengan a Londres y tendrán los mejores juegos nunca vistos», dice. Respecto a la situación de los transportes en la capital, que en todo momento fue unos de sus puntos más débiles, se trazó un plan que supondría que el 80 por ciento de los atletas olímpicos y el 98 por ciento de los atletas paralímpicos tendrían que viajar menos de 20 minutos para llegar de su lugar de alojamiento a las sedes. La candidatura de Londres ofrece el programa «Quédate en Casa» merced al cual miles de personas tendrían la oportunidad de ofrecer vivienda gratuita a las familias de los atletas olímpicos que participan en los Juegos. El director Ejecutivo de la Asociación Británica Olímpica, Simon Clegg, considera que esto es algo que ya se ha probado con éxito en otras ciudades: «Esto fue algo que funcionó muy bien en Sidney y muy popular allí. Trataremos de que coincidan los intereses deportivos y culturales, así como lingüísticos para ofrecer una oportunidad única a las familias de los atletas que visiten Londres». Otro de los atractivos es la diversidad étnica y cultural de Londres. Población: 2,8 millones de habitantes. Fecha de los Juegos : 25 de julio al 12 de agosto. Presupuesto : 3.500 millones de euros. Instalaciones : Estadio olímpico con capacidad para 80.000 espectadores. Distancias : 17 deportes se disputarán en un radio de 15 kilómetros de la Villa Olímpica. El aeropuerto está a 44 kilómetros. Capacidad hotelera : 69.203 habitaciones. Transporte: 405 kms. de metro y 906 de ferrocarril. Apoyo popular : 82 por ciento (Londres) y 75 por ciento (Reino Unido). Ingresos potenciales : 834 millones de euros. Experiencia en los Juegos : Ha albergado los Juegos de 1908 y 1948. Puntuación : 7,5. La Comisión de Evaluación calificó su proyecto «de muy alta calidad».