Avelino García inscribe en la cita provincial unanuevapáginaépica Oblanca no falla en ligeros y «El Junco» se lleva su primer título en semipesados

Vegas del Condado acogió ayer el campeonato provincial de lucha leonesa en un corro donde estuvieron presentes las máximas autoridades de la provincia y por encima de ellas Antonio Verduras, que fue homenajeado con la medalla de oro al mérito deportivo. Los triunfos en las cuatro categorías se los repartieron Javier Oblanca, que ya suma cuatro provinciales; Héctor García, ocho campeonatos; Clemente Fuertes, que se estrenó como campeón provincial en semipesados y ya son cuatro los títulos en su haber; y la gran sorpresa de la tarde, y quizás la confirmación de uno de los grandes del peso pesado, Avelino García, que ayer logró su primer título grande y pasó a formar parte de la historia de este deporte. En la categoría de pesados todas las quinielas apuntaban a Eduardo Díez como campeón provincial pero las historias se escriben en el corro y las lógicas en esto de la lucha, muchas veces no salen y prueba de ello fue el tremendo espectáculo que Avelino García pudo brindar a todos los presentes. El luchador de La Valcueva es de esos luchadores bonachones que nunca dice una palabra más alta que otra y que sale a luchar porque le gusta y lo lleva en la sangre. Muchos son los corros en los que todo se le ha venido en contra. Ha sabido ganar corros y estar entre los mejores a la par de que muchos días no tiene su tarde y en las primeras de cambio es apeado del corro. Pero ayer a la historia de la lucha leonesa le faltaba un nombre y él supo ponerle su rúbrica con un corro ganado a los más grandes de este peso, sin dilaciones, sin temores y siempre al ataque. Comenzó el peso con once luchadores en liza y todos los aplausos, como no podía ser menos, se los llevó el reaparecido José Luis Ferreras «El Chopo», natural de la localidad de Vegas, un clásico en este tipo de trofeos y un palmarés impresionante el que avalaba a «El Chopo» pero, los años y la inactividad no pasan en balde, y ayer en la fase previa su rival fue Avelino García. Lo intentó el luchador local pero Avelinín, que ayer se convirtió en Avelinón, no quería dejar pasar la ocasión y con dos tranques supo pasar a la siguiente ronda donde lejos de tocarle una perita en dulce, le tocó medirse a Roberto Andrés Moro. El de Riaño venía de ganar en el corro celebrado el día anterior en Remolina, pero Avelino nuevamente serio, concentrado y atento a la oportunidad que se le presentaba en un abrir y cerrar de ojos supo dar cuenta de «Morín». En las semifinales Eduardo Díez puso a prueba al de La Valcueva pero a pesar de darle una entera, Avelino supo nuevamente salir airoso y meterse en la final para medirse a Mario Villanueva. Media caída le dio el luchador de León y Avelino lo solucionó con una entera y le pasó lo peor que a un campeón le puede pasar, se lesionó. Gritos de dolor pero si se retiraba perdía el provincial. Reposó, el médico le vendó y cojo volvió al centro del corro y lejos de echarse atrás defendiendo el título, dio un tranque que le sirvió para hacerse con su primer título de campeón provincial. La categoría de ligeros se decidió a las primeras de cambio sin tiempo para que los aficionados se acomodaran en el enorme graderío de Vegas del Condado. El sorteo deparó la final quinielista anticipada, Ibán Sánchez y Javier Oblanca. Y las cosas comenzaron a sonreír para el luchador de Barrillos que en los diez primeros segundos supo adjudicarse la primera entera a su favor, pero en el mismo tiempo Javier Oblanca replicó a éste e igualó la contienda y cuando el crono marcaba 34 segundos de combate, un tranque certero de Oblanca le sirvió para hacerse con un 80% del campeonato provincial ya que aún en el corro quedaban luchadores capacitados para tirar al de Villabalter. Pero éste comenzó a poner tierra de por medio tras ganar a su máximo rival dio cuenta de Luis Miguel Moro, lo que le sirvió para meterse en las semifinales y mientras su hermano Víctor daba cuenta de Carlos Fernández, él hacía lo propio con Luis Ángel Rodríguez y, de esta manera, los dos hermanos pasaron a disputar un título que estuvo apretado pero que finalmente se fue para las arcas de Javier Oblanca. Clemente Fuertes a punto estuvo de perder el tren, no el de la lucha, puesto que terminó ganando el corro, pero sí el que le trasladaba a Barcelona donde actualmente se encuentra trabajando. El título no fue un camino de rosas, Mariano Sánchez, Benigno González y Jesús María Cabero fueron los rivales que el de Tendal tuvo que apear para meterse en la final y como el tiempo apremiaba, Roberto Rodríguez tampoco pudo frenar a «El Junco» de Tendal.