El Barça no pasa del empate en su primer partido de la gira asiática
Los de Rijkaard dominaron pero al final se dejaron igualar a balón parado por los japoneses
Ronaldinho encara y supera a un jugador japonés con uno de sus recortes eléctricos
El Barcelona empató en su primer partido asiático de la pretemporada ante el Yokohama Marinos de Japón, un equipo más preparado físicamente pero mucho peor dotado técnicamente y que igualó la contienda aprovechando una de las carencias del conjunto catalán, las jugadas a balón parado. El encuentro, además, sirvió para que Ronaldinho debutase en pretemporada, después de sus vacaciones. Avido de fútbol, el brasileño se dejó querer por la afición japonesa y supo reactivar el juego ofensivo del Barca en la segunda mitad. El equipo azulgrana no tuvo problemas para hacerse con el dominio del balón y jugar con cierta comodidad. Su técnico, Frank Rijkaard, aprovechó la ocasión para hacer jugar juntos a Edmílson, Xavi, Van Bommel y Deco, gracias a la ausencia inicial de Ronaldinho. El rival no permitió sacar conclusiones definitivas, pero el experimento ofreció buenas sensaciones, con Edmílson como guardaespaldas de los centrales, Xavi en su papel de director de juego y Van Bommel, un poco escorado a la derecha, ejerciendo ya su ascendencia en el equipo y recuperando multitud de balones. Deco cubrió el costado izquierdo, por donde suele actuar Ronaldinho. Con un esqueleto reforzado y armado desde la retaguardia, el Barcelona trianguló fácilmente y conquistó la medular sin ningún problema, pero no se lanzó a por el partido. El planteamiento del Marinos fue simple: acumular jugadores en campo propio para intentar sacar partido de la velocidad de sus puntas. Poco antes del descanso, Xavi, libre de marca, hizo el primer gol del partido. Faltos de puntería en el juego, los japoneses sí afinaron a balón parado: en un córner mal defendido por los jugadores del Barcelona, Kurihara remató de cabeza sin oposición para empatar.