El mal de Behçet le desinfla

Los Mundiales de Helsinki han refrendado una realidad que no se le escapaba a nadie. Y es que Manuel Martínez ya no es el que fue antaño. Está muy lejos de los 21.47 que le consagraron en la élite del atletismo español y del lanzamiento de peso en particular. Su nivel ha ido bajando paulatinamente e incluso ni siquiera se muestra capaz de superar la barrera de los metros. En sus últimas citas sólo la ha rebasado en Salamanca, su pista fetiche, con un tiro de 20.32, su mejor marca de este año. El resto de lanzamientos han dejado en evidencia al leonés. En los Juegos del Mediterráneo, celebrados en Almería durante el mes julio, envió la bola hasta los 19.97, lo que le proporcionó la medalla de oro pero despertó muchas dudas sobre su puesta en escena en los Mundiales. En el Campeonato de España, a finales de julio, se volvió a topar con la barrera de los 20 metros con un lanzamiento de 19.89. Tras dicha actuación, el de Villadangos reconoció que ni siquiera aspiraba a medallas en Helsinki. En la cita finlandesa se cumplieron todos los presagios y se quedó fuera de las finales con un discreto mejor tiro de 19.55. Pero su bajo rendimiento no es nada nuevo. Hace dos años, en los Mundiales de París, también se despidió en la ronda de clasificación con un mejor tiro de 19,78 metros. El pasado año, en los Juegos Olímpicos de Atenas, lanzó la bola hasta los 20.84. El leonés enfocó su preparación de cara a esta cita y aunque el resultado mejoró ostensiblemente sus últimas actuaciones, se tuvo que conformar con una cuarta plaza. Se han buscado muchas excusas al escaso rendimiento de Manuel Martínez en la actualidad. De hecho, su propio entrenador rompió una lanza en favor suyo y advirtió que su edad -30 años- podría ser la causa del bajón en sus resultados. Además, agregó que la multitud de citas a las que acude el leonés podría estar minando el potencial del lanzador. Sin embargo, y según se ha publicado en algunos medios de comunicación nacionales, la razón del exiguo rendimiento de Manuel Martínez estaría en una extraña enfermedad que padece. Se trata del mal de Behçet, que ha provocado que el atleta haya perdido unos 20 kilos en dos años. El problema le impide llevar una dieta adecuada. No puede ingerir la cantidad de glucosa necesaria y lastra totalmente la preparación del de Villadangos De origen desconocido, es una enfermedad multisistemática, que afecta a varios sistemas, y provoca una inflamación de los vasos sanguíneos. Se puede manifestar a través de lesiones cutáneas, úlceras, llagas o, incluso, con una pérdida parcial de visión. Aunque se trata de una enfermedad de distribución mundial, se observa con mayor frecuencia en Oriente. Tiene poca incidencia entre la población europea y se suele dar entre la gente más joven. Fue descrita por el dermatólogo turco Behcet en 1937 y desde entonces todavía no se ha logrado averiguar cuál es la causa última de esta enfermedad. Según ciertos estudios, esta enfermedad tiene un fuerte componente hereditario que, al ponerse en contacto con algún elemento del ambiente, altera el sistema inmunológico que empieza a atacar al propio organismo. La enfermedad de Behçet se ha convertido en el verdadero lastre de Manuel Martínez.