El Campeonato de España marca un antes y un después para la Federación

Los Campeonatos de España disputados en Calella pasarán a la historia, no por sus grandes registros, sino por haber sido los Campeonatos del final de una etapa y así, los del 2006 tendrán ya como marco de trabajo el plan estratégico con el que se buscará relanzar la natación española. En ese marco resalta el nombre de una leonesa, Noemí Feliz, que pese a firmar una discreta participación en el Nacional, apunta muy alto de cara a un futuro no muy lejano. Sus problemas físicos durante la disputa del campeonato lastraron completamente a la nadadora de Bembibre, que no pudo alzarse con ninguna medalla. Otra nadadora, Erika Villaecija, también forma parte de esa nómina de elegidos. De padres leoneses, tuvo una fenomenal participación en Calella y se consagró como la mejor nadadora española del año. La natación española concluye una etapa, antes y después de Montreal-Calella. A partir de ahora habrá reflexión y reuniones. El diez de septiembre la Junta directiva de la Federación Española comenzará a tomar las primeras decisiones sobre técnicos, nadadores y planes. Y volverá a competir en diciembre Nina Jivaneskia, cuyo concurso continua siendo necesario para equilibrar los resultados internacionales de la natación española.