El Kaiser cumple sesenta años
DOCUMENTALES en la televisión, artículos en la prensa y una recepción digna de un jefe de Estado: Alemania festejó ayer domingo los 60 años de su hijo pródigo, Franz Beckenbauer, el 'Kaiser', que pretende agrandar su imperio a toda Europa. Veinte años después de haberse retirado, Beckenbauer sigue siendo el futbolista más célebre de Alemania y tal vez el más rico, y si duda el más escuchado e influyente. Nacido en Múnich, Beckenbauer es amigo de las estrellas, políticos y empresarios más influyentes de todo el país. Sus ex compañeros de la 'Mannschaft', campeones mundiales en 1974, el ex astro del tenis Boris Becker y la campeona olímpica de patinaje artístico Katarina Witt estarán presentes en la fiesta del 'Kaiser', que ayer sopló las 60 velas ante las televisiones. El presidente del Estado regional de Baviera, Edmund Stoiber, invitó para el próximo jueves a 350 personas para ofrecerle una ceremonia de festejo en Múnich. Aunque pudiera gozar de una 'jubilación' dorada, Beckenbauer prefiere seguir bien ocupado, organizando la Copa del Mundo de Alemania 2006, trabajando en su club de toda la vida, Bayern de Múnich, o recaudando fondos para obras de caridad. Ex líbero de la 'Mannschaft' (103 veces internacional) y del Bayern de Múnich (cinco títulos de la Bundesliga, cuatro Copas de Alemania y una Copa de Europa), doble vencedor del Mundial (1974 como jugador y 1990 como entrenador), dispone de una agenda tan impresionante como su palmarés. «El jugador del siglo», como lo calificó una revista germana, es el personaje central que usan las compañías alemanas más importantes para promocionar sus productos. Ex compañero del brasileño Pelé en el Cosmos de Nueva York a finales de los 80, ahora Beckenbauer pasará más tiempo en los aviones que en las canchas de golf, su otra pasión.