España revalida el bronce en Europa con coraje y calidad (83-65)
Por tercer campeonato consecutivo, las pupilas de Domingo Díaz se suben al cajón
España continúa en el tercer cajón del podio europeo gracias al coraje y la calidad de una gran hornada de jugadoras que, por tercer campeonato consecutivo, han conseguido el bronce continental para el baloncesto femenino español en un partido de enorme entrega, esta vez contra Lituania, igual que en Francia 2001, y como ante Polonia, en Grecia 2003. Domingo Díaz y sus jugadoras sufrieron menos que otras veces pese a la entidad del rival, pero su entrega y su ambición siguieron intactas. Lituania, una de las grandes selecciones europeas y mundiales, había ganado a España en un amistoso de preparación y también en la única derrota que el bloque español encajó en la primera fase del torneo turco, en Esmirna, y pagó la factura el día que más importaba ganar. Parecía que el equipo báltico tenía tomada la medida a Amaya Valdemoro y sus compañeras, pero las diferencias de los dos partidos anteriores siempre fueron ajustadas (89-92 y 74-69) y España siempre estuvo dentro de ambos choques hasta el final. La película en Ankara cambió radicalmente. El quinteto nacional salió en tromba, con una defensa de libro y el característico juego de contragolpe que tantos beneficios le ha dado en Turquía perfectamente afinado. Lituania no sabía donde estaba. Acabó el primer cuarto con cinco paupérrimos puntos y unos porcentajes de tiro impropios de un equipo con tanta calidad, totalmente fuera de onda y catorce puntos por debajo (19-5). España había dado un paso de gigante hacia la medalla. Era evidente que la derrota frente a la República Checa en semifinales había obrado un efecto multiplicador en la ambición española, mientras que las bálticas habían acusado negativamente la encajada contra Rusia. Incluso la pelea en el rebote, donde Lituania partía con ventaja, tenía color español. Las ex soviéticas hicieron un amago de reacción en el segundo cuarto (28-20 m.16) rápidamente abortado que mantuvo el partido en los mismos cauces.