Alonso alcanzaría el título si logra el podio decimotercero

Un nuevo podio, no apto para supersticiosos, dado que sería el decimotercero de la temporada, le otorgaría matemáticamente el título mundial de Fórmula Uno este domingo al asturiano Fernando Alonso, que se convertiría en el primer español y en el más joven de la historia en conseguirlo. A Fernando (Renault), de 24 años, le bastará, para ser campeón del mundo y batir, de paso, el récord de Emerson Fittipaldi -que ganó el primero de sus dos títulos mundiales en 1972, cuando tenía exactamente 25 años, ocho meses y 28 días-, con que el finlandés Kimi Raikkonen (McLaren Mercedes) no sume cinco puntos más que él el domingo en el circuito paulista de Interlagos. Pero en el peor de los casos, suponiendo que el finés ganase en el Autódromo José Carlos Pace, al 'crack' del Principado -que llegó hoy a Sao Paulo, en una jornada en la que se alternó el cielo encapotado con la lluvia- le bastaría con subirse de nuevo al podio, ubicación en la que ya se ha fotografiado doce veces en lo que va de temporada y en 20 ocasiones desde que es piloto de Fórmula Uno. Alonso logró su primer podio en 2003 en Malasia, cuando, después del rodaje en Minardi y el año de probador en Renault, sorprendió al mundo entero al subir, en su segunda carrera a bordo de un monoplaza con ciertas garantías, a un cajón al que accedió como el más joven de la historia, un día después de haberse convertido también en el más novel en arrancar desde la 'pole', siete meses después de haber cumplido los 21 años. Dos semanas después de ser la sensación de Sepang, precisamente aquí, en Sao Paulo, Alonso se confirmó en la Fórmula 1 con un nuevo podio, al que no pudo subir a pesar de finalizar tercero, ya que fue protagonista del accidente que provocó la suspensión de la prueba, cuando su coche se estrelló contra el muro tras encontrarse con los restos del monoplaza del australiano Mark Webber, que pilotaba un Jaguar.