Diario de León

Al Real Madrid le basta la pegada de Ronaldo para golear al colista (0-3)

Luxemburgo parece que ha rectificado y ha borrado el cuadrado mágico de su ideario «El jugador con talento y calidad es el que marca las diferencias»

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Iñaki Lasa - vitoriaefe | vitoria
León

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La segunda parte del Real Madrid ante el Athletic parecía que iba a suponer un punto de inflexión en el juego del conjunto blanco, pero en Vitoria volvió a las andadas, realizó un mal partido y se salvó porque tiene jugadores de la talla de Ronaldo, que se bastan ellos solos para dar la vuelta a un choque condenado al empate a cero. El equipo merengue no encuentra el juego que se le supone. Vanderlei Luxemburgo parece que ha rectificado y ha borrado el cuadrado mágico de su ideario futbolístico. Además, premió con la titularidad a Guti como se le pedía desde distintos ámbitos, tras su brillante actuación en el partido frente al Athletic, pero ni así le salen las cosas al conjunto blanco. Continúa con la lentitud que le caracteriza desde el comienzo de la temporada, su juego es previsible y la circulación del balón no corresponde a la de un equipo que debería luchar por todos los torneos. Mediocentros sin creatividad Baptista y Pablo García no son mediocentros creadores, Guti sí, como ya lo ha demostrado en innumerables ocasiones, sin ir más lejos en los 45 minutos que jugo frente al Athletic el jueves, pero el técnico carioca no tuvo mejor ocurrencia que situarlo en la izquierda, donde evidentemente el canterano no muestra su mejor versión. Su lugar natural lo ocupó Baptista, un grandísimo jugador, como lo demostró en las dos temporadas que estuvo en Sevilla, pero que en esa posición se convierte en un futbolista discreto. No sabe crear juego y tampoco es un jugador de contención. Llegando desde atrás al área es un futbolista inconmensurable, aunque su entrenador se resiste a situarlo ahí. Con Guti y Baptista fuera de sus posiciones naturales, el Real Madrid jugó como lo lleva haciendo la mayor parte de la temporada: mal. Los 20 minutos finales frente al Cádiz y la segunda parte frente al equipo bilbaíno en la última jornada ha sido lo único salvable. En total un poco más de una hora. El Alavés, que sólo había sumado un punto en las cuatro primeras jornadas de Liga, perdió rápido el miedo que le infundía el rival. Bodipo y De Lucas pudieron adelantar a los blanquiazules, pero no lo hicieron. El choque seguía por las mismas coordenadas, el conjunto blanco desplegando un preocupante juego y el Alavés, colista de la competición, desaprovechando, debido a su limitaciones, una oportunidad de oro para sumar puntos, ya que pocas veces se encontrará con un Real Madrid tan desorientado. Pero el conjunto blanco, que aún realizando un juego mediocre tiene un inmensa pegada, marcó a la hora del juego tras un error defensivo que aprovechó Ronaldo. De la eficacia del atacante brasileño volvió a quedar constancia en las postrimerías del partido, cuando anotó su segundo tanto tras regatear al portero del Alavés. Luego, con el Alavés rendido, llegaría el tercero, de la mano de Guti, pero la goleada sólo maquilla el confuso juego del Madrid. En suma, el Real Madrid, sin emplearse a fondo ni apretar el acelerador, superó el escollo de Mendizorroza con más facilidad de la prevista en un principio, gracias a la efectividad y pegada de Ronaldo hasta superar claramente al colista Alavés, que fue de más a menos. Sin embargo, el primer grueso error defensivo del equipo blanco de Vanderlei Luxemburgo llegó en el minuto seis, robando Bodipo la pelota para escaparse en solitario y rematar fuera por poco con todo a su favor. El susto no significó nada desfavorable para el Real Madrid de cara a sacar los tres puntos en litigio frente al Alavés, en un partido sin demasiada historia.

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