El corazón puede con la cabeza

Ademar sumó ayer un triunfo clave. Y no fue precisamente fácil. Era un partido cargado de sentimientos, con mucho en juego, pero también cargado de recuerdos por el nuevo choque frontal de Ademar y Celje sobre la pista. Y el choque respondió a lo esperado. Fue intenso, tenso -con muchas exclusiones desde el inicio- y con final ajustado, con mucha preparación táctica previa porque los dos equipos se conocen bien. Ayer fue la consagración ante la grada para Mirko Alilovic. El deseado portero ofreció una segunda parte más que destacada y frenó a un Celje que vivía hasta esos momentos con una cómoda renta en el marcador. Y es que el Celje respondió a los parámetros esperados y su rigor defensivo se le atragantó y mucho al Ademar desde el arranque. El equipo esloveno -una de las mejores canteras de Europa-, aunque se tenga que renovar por los jugadores que se le escapan a golpe de talonario, es un verdadero experto en el orden defensivo. Ese aspecto marcó el arranque del choque, con un Celje bien colocado atrás con una defensa mixta 5-1 y con un hombre flotando siempre a Kjelling. Raúl y el noruego se veían muy frenados, y fueron precisamente ellos mismos los que en la segunda parte consiguieron encontrar vías para anotar y dar la vuelta al marcador, a base de raza. De entrada Cadenas contó con Ivo Díaz y Stranovski en su siete inicial, y el Ademar fue fiel a su estilo, con una intensa defensa 6-0, frente a la 5-1 elegida pr Miro Pozun. Y en los eslovenos una premisa. El Ademar no podía correr y lo consiguieron al menos hasta el descanso, con un único contraataque de los leoneses que paró Skof a Ivo Díaz. El ambiente ayer en León era frío y a la grada parecía que le costaría meterse en el partido, pero una exclusión a Ivo Díaz, con 1:20 transcurridos puso por vez primera a la afición en pie. Esos minutos iniciales fueron especialmente duros para el Ademar en las decisiones de los colegiados, que sancionaban con un criterio bastante distinto lo que ocurría a un lado y otro del campo. Con toda esa tensión sobre la pista Uros Zorman aprovechó para inaugurar el marcador. Esos minutos iniciales fueron de empates continuados, con el Celje llevando tibiamente la iniciativa. Al Ademar le faltaban ideas adelante y se estrellaba contra una sólida defensa del Celje. Un robo de Kokcharov permitió al Celje en el ecuador de la primera parte elevar la renta eslovena a dos goles (6-8) aprovechando una exclusión en Ademar. Y esa superioridad favoreció un 6-9 inquietante. Raúl Entrerríos salió en defensa del Ademar en ese momento delicado y consiguió dos goles consecutivos, gracias a sendas asistencias de un Kjelling que no poder lanzar aprovechaba para dar juego a su compañero. El Ademar empezaba a repartir minutos y Zorman se fue por dos minutos. Pero Stranovski cometió un error al protestar un fuera evidente e igualó el número de hombres sobre la pista. En esa circunstancia el Celje aprovechó para dar su mayor estirón y conseguir su mayor ventaja con un parcial de 0-4 (8-13), que alivió de nuevo Entrerríos con un gol rápido. Cadenas puso en pista a Alilovic y en su primera intervención realizó tres paradas consecutivas en un mismo ataque que el Celje sí anotó a la cuarta intentona, mientras sus compañeros eran incapaces de coger un rebote. Era el peor momento para un Ademar que necesitaba pasar por el vestuario. En la segunda parte cambiaron las cosas, aunque el Celje se mantuvo entero durante los primeros minutos. Cadenas situó a García Parrondo adelantado en defensa y el rival empezó a tener más problemas para mover el balón. En el conjunto local Kjelling y Entrerríos soltaron el brazo y empezaron a anotar con facilidad, mientras al equipo visitante lo mantenía el lateral bielorruso Harbok -sustituto del emigrado a Ciudad Real Rutenka- con sus lanzamientos. Pero la muñeca más caliente era la de Kjelling, que consiguió cuatro goles consecutivos para estrechar el marcador en el ecuador de la segunda parte. Y como complemento un Alilovic bien asentado atrás. Ademar erró un par de ocasiones para lograr el empate pero a la tercera llegó en forma de un 22-22 a falta de diez minutos, a manos de Stranovski. El conjunto marista iba a más y los eslovenos a menos, con Zorman sentado al sufrir un lesión tras pisar mal. La grada se vino arriba y empujó al equipo para alcanzar un parcial de 6-0 (25-22) mientras el Celje permanecía cinco minutos sin marcar. El partido ya estaba de cara para el Ademar, pero tuvo que salvar Alilovic varias opciones del rival para conseguir completar un triunfo vital en esta primera fase de la Liga de Campeones. Un gol de ventaja, pero dos puntos, que era lo verdaderamente importante. Ademar ha jugado tres partidos consecutivos en el Palacio de Deportes -Athinaikos, Almería y Celje- y en esta semana que comienza mañana, lunes, toca de nuevo subirse al autocar y también al avión. El equipo de Manolo Cadenas visitará el miércoles al Teka Cantabria en su pabellón de Santander en una cita compleja dentro de este carrusel de partidos, ya que es de las de obligada victoria ante un rival al que gusta dar sorpresas en la liga. Y sin apenas tiempo para entrenar el Ademar se embarcará con rumbo a Grecia para disputar la cuarta jornada de la Liga de Campeones, en la cancha del Athinaikos, en otra cita de ineludible triunfo para ratificar opciones ante de visitar al Celje.