El Bembibre golea al Benavente e ilusiona con el juego desplegado (6-0)
Cubero, con un gran tanto, y Addison fueron los mejores en un gran partido de los bercianos
Victoria clara y contundente del Atlético Bembibre por seis goles a cero en un buen partido del cuadro de Rivas. A los 27 minutos ya ganaba por 2-0 con goles de Lago y Cubero, éste último desde unos 35 metros, después llegaría la expulsión algo rigurosa del visitante Javi, en el 30, dejando el camino más fácil hacia la victoria final. El dominio, siempre bembibrés desde el principio, hacía presagiar una buena tarde de fútbol como así fue. Los benaventanos en esta primera parte tan solo dispararon a puerta por medio de Pablo que mandaba al larguero. Los locales seguían acosando el área visitante con triangulaciones al primer toque desbordando con comodidad a los laterales y poniendo en apuros al meta local. En el segundo tiempo los rojiblancos siguen dominando a sus oponentes y es en principio el Benavente quien trata de sorprender a Quintero con disparos lejanos, por parte de Alijas y Carlos Martín. Son minutos donde el equipo de Rivas parece acomodado con ese resultado hasta el minuto 76 donde los cambios efectuados dieron más mordiente, sobre todo para que Addison, acosando a su rival le robase la cartera y solo ante Gonzalo bate por bajo el portal enemigo. Poco después Tyrone, tras un servicio de Addison marca de cabeza. Faltaba ya poco y los rojiblancos que habían festeado, decidieron finalmente ir a por más goles notándosele esa claridad de ideas con una superioridad técnica y numérica. Un penalti de Gorka sobre Lago y marcado por Zapico cerraría la cuenta goleadora donde esta vez sí que es verdad que la eficacia de la escuadra rojiblanca se hizo notar en la sentencia final. La entrada de Puente y Tyrone dieron otro mordiente en ataque y eso lo agradeció el espectador dado que a raíz de ese momento el juego fue más vistoso y más vertical buscando el portal de Gonzalo. El Bembibre, con esta victoria bien merecida a todas luces, hace que se aproxime más a la parte alta de la clasificación. El Benavente nunca dio sensación de enemigo fuerte ni matagigantes como venía precedido de esa fama. Los locales jugaron a placer, sobre todo a raíz de la expulsión de Javi, pero no puede ser objeto de discusión la victoria ya que por entonces el Bembibre tenía sentenciada la confrontación notándosele que está más rodado que su rival.