SIN AFANES POLÉMICOS
Ahora a Grecia
CASOS Y cosas del increíble calendario balonmanista. El miércoles en Santander y el domingo en Grecia. Viajeros permanentes, los jugadores de Ademar van y vienen, tal decían hacerlo en su día las maletas de la Piquer. Dos partidos por semana y para descansar un singular torneo de selecciones. Sin duda la Federación Internacional de Balonmano, copiando a la Federación Internacional de Fútbol, aprovecha ocasiones para llenar las arcas... Y a los equipos, que son el padre y la madre del invento y del evento, que les den árnica para restañar las secuencias de los golpes y de la vena viajera... Sin embargo Ademar, al menos de momento, sigue pudiendo con todo. Viajes, partidos cada tres días y rivales que, complicados en apariencia, pasan a ser presas fáciles. Tal el Teka de Santander que venía de ganar con autoridad, por goleada, al Alcobendas en su cancha, -allí donde Ademar sólo pudo ganar por la mínima- recibió un repaso de consideración. Victoria ademarista por catorce goles de diferencia y un guarismo de 43 goles marcados en la puerta santanderina. Con autoridad, suficiencia y efectividad. Después del «palizón» que los jugadores se pegaron, el sábado en el Palacio de Deportes, para doblegar a un Celje que mostró y demostró sus buenas maneras de gran equipo, viaje a Santander y triunfo abultado, sorprendente por la forma y manera fácil de lograrlo. Una victoria que dice mucho de un equipo que vio como se marchaban tres de sus puntales, al final de la temporada anterior. Un equipo aún en formación y sin embargo capaz de firmar actuaciones como las tenidas, ante el Celje y el Teka Cantabria, en tan sólo tres días y con un desplazamiento por medio. Kjelling, Morros, Roberto García y, muy particularmente, Martin Stranovsky. Once goles, once, marcó el jovencísimo extremo izquierdo llegado a Ademar para cubrir una baja importante en el equipo; un jugador que lleva camino de convertirse en figura. Velocidad, nervio, valentía y olfato de gol... y sólo veinte recién cumplidos años le contemplan. Pero sería injusto orillar la actuación de los restantes jugadores de la plantilla. Ahora, sin tiempo para deshacer el petate, camino de Grecia para jugar frente al Athinaikos un partido cuyo resultado puede ser decisivo en la clasificación de Ademar para la fase siguiente de la Copa de Europa. Ir y venir y marchar...