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| Entrevista | Juan Carlos Pastor |

«En esta Supercopa la selección ha jugado con la cabeza en otra parte»

Todavía dolido por el pobre papel en Alemania, Pastor atribuye el fracaso a la falta de entrenamientos y a que los jugadores pensaron más en los compromisos con sus clubes

falta más entrenamientos para crear un verdadero equipo

Publicado por
Leontxo García - hannover
León

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El seleccionador de balonmano, Juan Carlos Pastor, admite que, «inconscientemente», sus jugadores piensan más en los importantes compromisos con sus clubes que en la necesidad de defender su prestigio como campeones del mundo en la Supercopa de Naciones, a tres meses del Europeo de Suiza. Pero, sobre todo, atribuye el fracaso a la falta de entrenamiento con la selección y de descanso, en un calendario saturado. España luchará con Alemania por eludir el último puesto (sábado, 15,00, La 2). -¿Qué ha aprendido de las derrotas y el mal juego ante Francia y Suecia? -Que no se puede venir a estos torneos sin entrenar. De hecho, nos hemos comprometido ya para la Copa del Mundo en Suecia dentro de un año, que es un muy parecido a la Supercopa, y ahora no sé si debo arrepentirme. Esta época del año está saturada de partidos de Asobal y competiciones europeas, además de los viajes, y los jugadores han llegado cansados, y sin tiempo para entrenar juntos. -Pero Alemania también tiene una Liga durísima, y las estrellas de las otras cuatro selecciones están en las ligas española o alemana. -Sí, pero con matices importantes. Los jugadores básicos de la selección sueca están en el Kiel alemán, y los de Rusia en el Chéjovski. Los croatas tienen el problema inverso: juegan en la selección como si fuera un equipo, con un estilo claro, y luego sufren para rendir igual en sus clubes con un estilo distinto. Y es significativo que el partido por el quinto puesto va a ser España-Alemania, precisamente los países de las ligas más fuertes. -Ya, pero además contra Suecia y contra Francia, los jugadores parecían tener la cabeza en otra parte. - Sí, es verdad, pero recalco que lo hacen de manera inconsciente. También es cierto que si hubiésemos ganado a Francia habríamos jugado mejor contra Suecia. Se juegan mucho con sus clubes en esta época. Sin ir más lejos, el miércoles hay un Pórtland-Barcelona. En cambio, en enero, cuando la Liga y las competiciones europeas se paren para el Campeonato de Europa en Suiza, todo será distinto. -Pero son los campeones del mundo, tienen un prestigio que defender, y millones de españoles se sienten orgullosos y esperan mucho de ellos. -Normalmente, los campeones suelen fallar en el siguiente torneo, quizá porque necesitan bajarse de la nube. A toda esa gente que puede estar desilusionada con estas dos derrotas le pido que esperen hasta enero. Entonces, con el entrenamiento adecuado, la selección estará compenetrada como un equipo de club, con un estilo propio, que es lo que yo quiero. -¿Se atribuye usted parte de la culpa? -Sí, sí, por supuesto, siempre lo hago. No me gusta nada perder, y estaba muy satisfecho de haber perdido sólo un partido, y no decisivo, de mis diez primeros como seleccionador. Ahora ya son tres, y me duele, porque además sé que nuestros rivales están estudiando especialmente nuestros vídeos.