Tras la senda de Cruyff y Maradona en el Bernabéu

El barcelonista Ronaldinho Gaucho estaba ayer en todas las portadas, sus dos goles en el Bernabeu abrieron muchos informativos el día después de que su equipo derrotara a domicilio al Real Madrid (0-3), el día en el que el brasileño salió entre aplausos de Chamartín, donde otros dos ilustres azulgrana: Johan Cruyff y Diego Armando Maradona también triunfaron. «Jamás lo voy a olvidar. Ha sido perfecto. Pocos momentos en la carrera de un jugador puede pasar por esto», dijo después del encuentro el brasileño, consciente de que había hecho historia en el mejor escenario y el día perfecto para ello. Ronaldinho estuvo sensacional. Apareció en el momento justo para decidir el partido. Marcó el segundo y el tercer tanto, sacó los colores a Sergio Ramos, la gran promesa fichado a precio de crack mundial, y el Bernabeu se tuvo que rendir ante la evidencia. En temporada mundialista, el brasileño puede batir récords y puede poner de acuerdo, por una vez, a periodistas, técnicos y futbolistas. Los primeros votan por el «Balón de oro», galardón que otorga «France Football» al mejor jugador mundial del año y que ha sido concedido a Ronaldinho. Los seleccionadores votan por el «Mejor jugador Mundial de la FIFA», premio que el año pasado ganó el barcelonista y que este año figura entre los máximos candidatos. También Ronaldinho es favorito al máximo galardón que otorga la Fifpro, la asociación de jugadores. La demostración de Ronaldinho recordó a los barcelonistas otras dos excelsas actuaciones de jugadores azulgranas en el Bernabeu. La primera fue la protagonizada por Johan Cruyff, quien el 17 de febrero de 1974 lideró el histórico 0-5 en Madrid. El Bernabeu acabó rindiéndose a los cambios de ritmo de «El Flaco», la velocidad de ejecución y su clase. El Barca ganó aquel encuentro con un gol suyo, dos de Asensi, uno del peruano Hugo «Cholo» Sotil y otro de Juan Carlos, y los aficionados madridistas acabaron aplaudiendo al holandés. La segunda gran exhibición de un futbolista del Barcelona en Chamartín fue el 26 de junio de 1983 y el protagonista Diego Armando Maradona. Fue la ida de la final de la Copa de la Liga, una competición creada a instancias de José Luis Núñez y que tuvo escasa aceptación, ya que apenas se disputaron cinco ediciones. El Barcelona empató a dos y ganó la competición gracias al 2-1 conseguido en la vuelta. El gol de aquella eliminatoria y de la temporada lo marcó Maradona. La era del Pibe El Pibe arrancó desde medio campo, encaró al meta rival y lo regateó, no marcó a pesar de que entre la pelota y la línea de gol no había ningún obstáculo y esperó a que el lateral Juan José intentará arrebatarle el balón. La acción la culminó con un espectacular regate y la pelota dentro de la red, una acción que valió el unánime reconocimiento del Bernabeu. Ahora Ronaldinho, como antes Cruyff o Maradona, han puesto una pica en Flandes. El brasileño sabe que el equipo en el que juega, sea el Barca o la selección brasileña, es favorito en todas las competiciones que juega y no quiere desaprovechar esa gran oportunidad para encumbrarse mundialmente.