El Madrid busca su cabeza

La lección dada por el Barça en el Santiago Bernabéu descubrió los agujeros del Real Madrid que los resultados habían tapado de forma temporal durante la plaga de lesiones del último mes. El resultado y el juego del eterno rival han avivado las dudas en las entrañas del Santiago Bernabéu y en la cúpula de la directiva blanca, que no comprende cómo un equipo en el que se ha invertido este verano 90 millones de euros pueda jugar tan mal. Además, el buque insignia del Madrid, Raúl, se lesionó. Puede ser baja para los próximos 30 días. El capitán blanco pasará unas pruebas este lunes para determinar el alcance de la lesión. Es segura su baja para el partido de Liga de Campeones ante el Olympique de Lyón y también es seria duda ante la Real Sociedad el próximo domingo, por el momento. Aunque la cosa podría ser peor. De confirmarse el diagnóstico más pesimista, esguince de menisco en la rodilla izquierda, el delantero estaría cerca de un mes de baja. Raúl se perdería prácticamente todos los encuentros hasta el año que viene (dos en Europa y cinco de Liga), lo que viene a ofuscar un poco más los planteamientos de Vanderlei Luxemburgo a corto plazo Perdido en los cuadrados Perdido entre cuadrados mágicos, el técnico brasileño no da con las teclas que hagan sonar a la orquesta blanca. Falla la parte del centro del campo, donde no encuentra a los hombres que puedan ocupar esa franja de terreno; tampoco da con los futbolistas que sepan bascular cuando un hombre de la categoría de Ronaldinho se encuentra solo en la banda de Míchel Salgado, infatigable en las labores ofensivas y defensivas. Luxemburgo creyó que todos sus pupilos iban a presionar para extenuar el juego del Barcelona. Ahora, sabe que no tiene banquillo, que los galácticos destronados no dan más de sí. Por eso, ya ha solicitado más refuerzos al secretario técnico Arrigo Sacchi para el mercado de invierno. Además de la inminente llegada del italo-brasileño Cicinho, el Madrid baraja la posibilidad de contratar un lateral izquierdo y dos centrocampistas más. Parece que el dinero invertido en verano fue en balde. Muchas sonrisas Mientas, las sonrisas deambulaban por el entrenamiento del Barça. Habían completado su faena más redonda. Sin tiempo para degustarla en exceso, los jugadores del Barcelona, excepto Rafa Márquez con permiso del club, volvieron este domingo por la mañana al trabajo para preparar su próximo compromiso contra el Werder Bremen. Una suave sesión para los titulares ante el Real Madrid. Tras los habituales rondos adornados con multitud de bromas, el crack del Bernabéu abandonaba el campo de la Masía. Ronaldinho se merecía el descanso después de su obra maestra. El resto se ejercitó algunos minutos más. A destacar la exhibición de técnica que realizaron Deco y su protegido, Leo Messi, con los pies descalzos.