Cerrar

ANÁLISIS | UN JUGADOR Y UN SÍMBOLO

El «fichaje» de Íker

Florentino Pérez convierte a Casillas en galáctico por casi cuarenta millones de euros brutos en los próximos cinco años, una decisión popular cara a una grada que lo considera santo y seña del Madrid Butrague

El portero del Madrid y de la selección española compareció ayer con el vicepresidente Butragueño

Publicado por
Luis Villarejo - madrid
León

Creado:

Actualizado:

La renovación de Iker Casillas por cinco años con el Real Madrid no es una continuidad más. Es un fichaje en toda regla, que debe contar con las mismas bendiciones que la llegada de un extranjero fichado a golpe de talonario. Florentino Pérez ha subido el sueldo a Iker, le ha puesto la ficha en un segundo escalón, pero asegurándole cerca de 7,8 millones de euros, 1.300 millones de pesetas brutos anuales, y atarle es una de las medidas más serias e importantes que ha tomado desde que llegó a la presidencia del club. Es una decisión plausible y popular. Un portero da muchos puntos al año. No es una demarcación cualquiera. No hay especialistas de su nivel en el mundo. Y eso tiene un precio. Todos los últimos campeones de Europa son reconocibles por sus porteros. Dudek, Dida, Kahn, Schmeichel. Y los grandes expresos del fútbol europeo cuidan ese puesto hasta extremos insospechados. Buffon, en Juventus, ahora lesionado; Coupet en Lyon, Cech en el Chelsea, Reina en Liverpool. Y por supuesto Íker. Esa es la nueva Liga europea de los porteros, a la espera de que surja algún producto original en el Mundial de Alemania. No hay mucho menú en la carta de porteros de élite. Por eso, Florentino Pérez y el Real Madrid ha hecho lo mejor. Ahora, que Iker ya esboza una sonrisa de oreja a oreja, se pueden contar algunas claves que se han movido de forma confidencial en estos meses de tira y afloja. Iker nunca pensó en irse del Madrid. Nunca. Pero de haberse enquistado el proceso y estar libre el 1 de enero, su equipo favorito habría sido el Manchester United. Con Carlos Queiroz le une una buena relación. Sin embargo, Alex Ferguson, el hombre que manda en el United, tiene en mente fabricar su propio Iker, un chaval de 19 años, que está a la sombra de Van der Sar, un portero de transición y muy veterano que fichó el año pasado para pasar esta travesía del desierto. Porque fichar porteros de enjundia no es fácil. De todos las informaciones que han relacionado a Iker con clubes extranjeros, el único acercamiento informal ha sido uno del Arsenal. Y es que nadie en la Premier o Italia, los únicos campeonatos que pueden pagar el salario que merece Iker, se podía creer la salida de uno de los grandes iconos actuales del fútbol español. Por eso nadie dio el paso. Este contrato seguro va a tranquilizar un poco más a Iker. Un niño adolescente que se hizo hombre de un día para otro. Ponerse delante de 90.000 personas con 17 o 18 años no está al alcance de muchos. Perdido entre los demás en el campo no se nota mucho, pero ponerte los guantes del Real Madrid y mirar al tendido es otra historia. La historia sirve para no repetir errores. Un buen día se complicó la renovación de Cañizares. Y su salida provocó un terremoto en cascada. Buscar a otro no fue fácil y el dinero que se pagó entre fichar a dos guardametas más -Illgner y Bizzarri- y el abono de sus salarios demostraron que no merecía la pena tanto ruido. Cañizares luego fue muchas veces internacional y jugó dos finales de Copa de Europa con el Valencia.