Doce equipos de Leb retocaron la plantilla y otros dos el banquillo

Los nervios en la liga están a flor de piel y también las lesiones están a la orden del día en una competición que sólo ha vivido catorce jornadas. Se había anunciado y el paso de las semanas lo ha confirmado. La igualdad es máxima y los equipos suben y bajan en la clasificación con cada victoria o con cada tropiezo porque el margen es mínimo. Equipos que arrancaron abajo como el Huelva o Los Barrios están pujando y mucho arriba o el Calpe es hoy colista cuando en la jornada tercera era colíder. Y todos esos movimientos han hecho que los retoques en las plantillas no se hayan hecho esperar. En la Leb hay muchos equipos con bastante dinero, al margen de los clásicos, y eso se está notando casi desde la primera jornada. En estos momentos sólo hay cuatro equipos que no han realizado ninguna variación ni en su plantilla ni en su cuerpo técnico. Son junto a León, el Calpe, el Hospitalet y La Palma. En otros dos casos las modificaciones únicamente han afectado al cuerpo técnico. Se trata del Tenerife, que movió ficha con el segundo entrenador para fichar a Iván Déniz -canario ex primer técnico del Murcia el año pasado- y el Gijón, que incorporó la semana pasada a Joaquín Prado para sustituir a Diego Tobalina. También en materia de banquillos se produjo la llegada de Manolo Hussein al Murcia, para sustituir a Manel Comás, que emigró al Caja San Fernando de la ACB. Precisamente el equipo murciano protagonizó la semana pasada uno de los movimientos más sonados de las últimas fechas con la incorporación de Borja Larragán, que había tenido un contrato temporal con el Pamesa Valencia tras dejar León en junio. En total son doce los equipos que han modificado las plantillas a estas alturas de temporada, sobre un total de 18 compitiendo en la Leb. En algunos casos han sido incorporaciones, pero en otros muchos han sido retoques en la plantilla que han incluido la salida de algún jugador. Algunas de las variaciones son las siguientes: El último rival de Baloncesto León, el Drac Inca, ha visto la salida de Isma Torres y la llegada del alemán Jagla, entre otros movimientos. El Palma Agua Mágica incorporó a Robert Maras ya con la liga empezada y el Lobos Cantabria a Isaac López. El equipo que acude este viernes al Palacio de Deportes, Los Barrios, fichó hace semanas a Alex Burgos, que dejó el Bruesa, uno de los que más cambiado es el Bruesa -cortó a Rob Lewin-, un equipo con bastante problemas de lesiones como es el caso del pívot Eric Cuthrell -nada más llegar-. El CAI Zaragoza vio como Stewart se lesionaba y se trajo a Derrel Washington, y también cedió a Gran Canaria a Richard Fox, un jugador que ha mejorado su nivel al desembarcar en la ACB. Huelva hizo una rápida operación para deshacerse de El Gordo Williams y vio como Isaac López emigraba hacia el Lobos Cantabria, El Tarragona realizó hace un mes la incorporación del escolta leonés Rubén Méndez y el Plasencia buscó puntos en el perímetro con Mark Poag, que se estrenó precisamente en el partido jugado contra León en tierras extremeñas. Mucho cambio en Lleida Lleida tuvo mala suerte en la pretemporada con la lesión de Fran Rueda y ya ha cambiado los estadounidenses con la llegada de Ward y Fajardo. Finalmente el Melilla incorporó al veterano base Andre Turner y al pívot francés Tchiloemba, y al estadounidense Earl Williams. Ahora faltan tres jornadas para que se cierre la primera vuelta y sin duda el parón invernal traerá más modificaciones en las plantillas. En el caso de Baloncesto León la modificación prevista se frustró al no aceptar el ala-pívot Javi Mesa una oferta para incorporarse temporalemente a la plantilla para sustituir al lesionado Dani García. El jugador está entrenando con León y conoce los sistemas por lo que su asimilación sería rápida, pero rechazó la oferta y confía en recibir algún contrato interesante en las próximas semanas. León rechazó la opción de seguir buscando en el mercado porque Dani García podrá reincorporarse al equipo en enero y sólo faltan tres partidos por disputar, por lo que el rendimiento de un hipotético fichaje temporal no llegaría ser bueno y se gastarían recursos económicos que pueden facilitar un refuerzo a final de temporada.