Diario de León
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LLEGADO el parón navideño y por tanto el consiguiente descanso invernal, ya casi se ha consumado la mitad de la temporada en la Tercera División y se han producido muchas novedades, algunas de ellas bastante impensables. No se puede empezar a señalar nada sin antes recordar con pena la desaparición del equipo del Promesas Ponferrada, actual campeón de Liga, antes del comienzo de la temporada. Su presidente Faustino Pérez Vega decidió no continuar tras el palo de no lograr el tan ansiado ascenso. Este equipo vio como su gran plantel de jugadores se repartió por la geografía española y futbolistas como Ion y Carlos Alonso con 12 goles son los máximos realizadores de este grupo. Este equipo fue también el último conjunto de Luis Cembranos como jugador en activo así como ser el mejor conjunto en casa de todo el fútbol nacional español. Todo esto ya pertenece a la historia. Cinco son los representantes leoneses esta temporada teniendo cada uno sus objetivos. El Huracán Z vive sus momentos más dulces de su historia situado en posiciones de fase de ascenso y con la reciente inauguración del nuevo campo de hierba artificial que es municipal. El conjunto de Trobajo del Camino, que es su localidad, a pesar de que dispute sus encuentros en San Andrés por no disponer de campo reglamentario propio y que algún día deberá tener por tradición, historia y habitantes ha conformado un equipo para clasificarse entre los cuatro primeros puestos de la tabla, haciendo un gran esfuerzo económico con jugadores de experiencia y contrastados que de momento están cumpliendo el papel previsto y con un director de orquesta traído del Bierzo. La mitad del trayecto ya está hecho, sólo queda seguir por el mismo camino. El Atlético Bembibre tras el retorno a la categoría está en puertas de posiciones de fase de ascenso. Su plantilla ha sido retocada y ha formado un conjunto sobrio, sin fisuras y con casi todos sus jugadores de la comarca berciana. Los refuerzos de jugadores como Fernando, Puente, David, Ministro... han aumentado el nivel y calidad del conjunto del Bierzo Alto, siendo un equipo de los favoritos para la lucha por las primeras posiciones. El único pero es el caso Addison de cómo va a terminar, jugador que está siendo pieza clave y su falta se puede hacer notar. La única vía para intentar buscar una solución es el diálogo y eso debe saberlo el jugador y más cuando la sartén por el mango la tiene cogida el club. Esperaremos acontecimientos. La Hullera sigue fiel a su política de los últimos años de tener jugadores jóvenes que se curtan en la categoría unido a la experiencia de algún jugador veterano e incluso histórico en el equipo. El artífice de toda esta combinación de saber estar y de dar oportunidad a los chavales jóvenes es su entrenador Belarmino López, decano de los banquillos de este grupo octavo. Este conjunto pasa por ser agresivo y que le gusta jugar al fútbol, y eso a pesar del estado de su terreno de juego, jugando de tú a tú a cualquier rival. Su objetivo es estar posicionado lo más arriba posible y conjuntar el equipo partido tras partido. Todo esto tiene su mérito y el trabajo su premio. La Cultural B mantiene jugadores de la temporada pasada unido a otros que han pasado de juveniles bien de la propia entidad o de otros equipos, habiéndose marchado los que por edad han finalizado su ciclo. Su objetivo pasa como cualquier equipo dependiente de otro de superior categoría por hacer jugadores para el primer equipo. Esta temporada dos jóvenes futbolistas como Ayer y Murciego ya han debutado y eso en un conjunto de estas características ya es positivo. El entrenador también ha cambiado y ahora es Alejandro quien dirige la nave. Lo principal es que la cantera de sus frutos y estos no se marchen y se puedan aprovechar, ya que los resultados son una cosa secundaria aunque necesaria. La Bañeza continúa pasando penurias tanto económicas como deportivas, algo que le viene sucediendo en las dos últimas temporadas. La salvación es el gran objetivo y vendría nunca mejor dicho como agua de mayo. Los malos resultados sacrificaron a su entrenador Roberto Tejerina que no se le puede discutir su trabajo, empeño y ganas pero el fútbol son números y eso no se perdona. Le sustituyó José Díez que retorna a los banquillos y que debe dotar al equipo de todo lo necesario para salir cuanto antes del borde del abismo. La tarea va a ser dura y no será fácil pero es lo que toca y hay que apechar con ello. En definitiva, plantilla y cuerpo técnico deberán ponerse las pilas sin cometer errores porque no hay mucho tiempo de rectificar. Tras estas vacaciones vuelve a comenzar el trabajo y ha habido tiempo para analizar los pros y los contras así que ahora sólo queda decir eso de: «A jugar».

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