Jallas Amigo completó una desafortunada y desquiciante labor

El colegiado gallego Roberto Pablo Jallas Amigo tuvo una desafortunada y desquiciante actuación. Sin errores de bulto, el árbitro del derbi no midió a los dos equipos por el mismo rasero a la hora de señalar las faltas, hasta el punto de que ante la misma acción era punible para los jugadores blanco y no tanto para los blanquiazules, aunque en ningún momento la Cultural pueda achacar su derrota a las decisiones del gallego. Asistido en las bandas por Rey López y Vázquez García, estos fueron más dos acompañantes que árbitros asistentes, porque en escasas ocasiones levantaron la bandera para decretar falta, sino acompañaban al colegiado cuando éste ya la había señalado a pesar de que la misma se produjera en zona de su influencia. Jallas Amigo decretó 14 faltas a favor de la Cultural (4+10), por 28 a favor de la Deportiva (15+13), señalando 6 saques de esquina a favor de los locales (2+4) por tres a favor de los visitantes (2+1). Además, el colegiado gallego señaló a instancias de sus asistentes dos posiciones de fuera de juego al ataque culturalista (1+1), por cuatro al deportivista (1+3). En el aspecto disciplinario se mostró excesivamente tarjetero, al mostrar un total de 12 cartulinas amarillas (Aulestia, Vojvoda, Pepín, Buirgueña, Pablo Díez y Diego Galiano, por la Cultural; y a Chupri, Alberto, Bornes, Diego Ribera, Fuentes y Pereira, por la Deportiva), aunque manteniendo su misma línea se mostró cobarde cuando no se atrevió a enseñar la segunda cartulina amarilla a Galiano en el minuto 26 de partido. Además, se mostró rácano a la hora de decretar el tiempo añadido en cada periodo.