Pendientes de los patrocinadores
Preparar y llevar a buen puerto un proyecto de esta envergadura precisa de tiempo, dedicación y también, obviamente, una importante inyección económica. No en vano, sólo por participar en el Maratón Transahariano de Hoggar tendrán que desembolsar 1.200 euros cada uno de los cuatro intregrantes del equipo berciano. Por ese importe tienen derecho a viajar en avión de Madrid a Tamanrasset, visado, tasas, todas las noches de hotel durante la estancia en la ciudad, además de las cuatro noches en los campamentos volantes en el desierto. También se incluye la manutención completa durante todo el viaje, asistencia y apoyo técnico, seguro de viaje, asistencia a todos los actos y fiestas organizadas, así como la «mochila de equipación». Esto exige un gran esfuerzo para un grupo de personas que viven de su trabajo, el cual deben de abandonar obviamente durante todo el tiempo que permanecerán fuera del país. «Nos están asesorando mucho Ignacio y Carlos (son los dos policías municipales que el año pasado también vivieron una experiencia similar en el Maratón des Sables, en Marruecos) y también nos apoya Carlos, de Ruta Sport». Todas las ayudas son bien recibidas, pero Susana y sus compañeros de aventura están esperando la respuesta estos días de algún patrocinador para la prueba.