Escocia vuelve a ser grande y deja a Francia sin opciones

Una gran selección escocesa resucitó tras años de pelear por evitar el último puesto y acabó en la primera jornada del Torneo de las Seis Naciones con el favoritismo de Francia, una de las selecciones candidatas a ganar en 2006 el «grand slam» que obtiene el equipo que derrota a los otros cinco. De paso, los escoceses hicieron una gran favor a sus vecinos y eternos rivales, los ingleses, que prácticamente quedan como únicos candidatos a hacerse con el «grand slam». La delantera escocesa montó una plataforma tras otra para encerrar a los franceses en su línea de 22 y marcar su primer ensayo en el minuto 11 por medio de Lamont, con una renta que posteriormente aumentó Paterson con la transformación y dos golpes de castigo en 10 minutos. El mérito de Escocia estuvo también en su planteamiento estratégico. Los británicos supieron esconder a lo largo del partido el balón, Francia no sabe jugar sin la posesión del mismo y sufre mucho cuando lo hace encima como visitante. Los del gallo no inauguraron su marcador hasta que se cumplía el primer tiempo y sólo lo hicieron a través de un golpe de castigo. El regreso al terreno de juego tras el descanso fue como se esperaba de acoso francés, pero la gran defensa local y los errores de los favoritos evitaron que éstos redujeran la diferencia. La transformación de Paterson puso el partido en franquicia para los locales, que tan sólo tuvieron que mantener la diferencia a base de esconder el balón.