La selección pide la renovación de Pastor a gritos tras su llegada a Barajas

Menos de 24 horas después de perder la final ante Francia, la selección española celebró este lunes a su regreso de Suiza la medalla de plata en el Europeo «como un triunfo» y pidió a gritos la renovación de Juan Carlos Pastor, aunque el técnico vallisoletano tiene asegurada su continuidad hasta después de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008. Al igual que ocurriera hace justamente un año tras la conquista del oro mundial, los jugadores de la selección, animados por el lesionado David Barrufet, aclamaron públicamente en el aeropuerto de Barajas a Pastor, a quienes reconocen como uno de los principales artífices del nuevo éxito. «El cántico de ¡Pastor renovación! esta vez ha sido una gracia de los jugadores, porque el seleccionador prolongó su contrato el año pasado hasta los Juegos de Pekín y en esta ocasión no hay ningún problema para que siga al frente del equipo al menos por dos años más», confirmó el presidente de la Federación, Jesús López Ricondo, quien durante la recepción en Barajas cedió todo el protagonismo a jugadores y técnicos. Tras la decepción y tristeza de la tarde del domingo en Zúrich, las risas y la alegría suplieron a las lágrimas, al ser conscientes los miembros de la expedición española de la importancia y dificultad que supone conseguir el subcampeonato de Europa un año después del título mundial. «Hay que valorar mucho la plata», sentenció Pastor. Además, los jugadores se mostraron convencidos de que la de Suiza «no será la última final» que disputará este grupo. «El futuro está asegurado», clamaron los internacionales, «muy satisfechos y tremendamente orgullosos», como reconoció Mateo Garralda.