Cerrar

El Barça culmina su semana de revanchas derrotando al Zaragoza

Eto'o amenazó con dejar el campo por gritos racistas pero Rijkaard le convenció para seguir

Publicado por
Sergi Olego - zaragoza
León

Creado:

Actualizado:

El Barça culminó su semana de revanchas alcanzando un triunfo en La Romareda (0-2) en un pobre partido que cambió de signo justo después de que Eto'o iniciase su pequeña rebelión contra el racismo. La casualidad provocó que las quejas del camerunés, a punto de abandonar incluso el terreno de juego ante tanto insulto impresentable, dieran paso al penalti convertido por Ronaldinho y al posterior tanto de Larsson que acabaron por sentenciar al Zaragoza. Tanta repetición provocó que el Barça saltase a La Romareda con la lección aprendida. Evocando su reciente visita a Londres, Rijkaard lanzó órdenes concisas y directas para evitar que sus jugadores cometiesen errores en la zona de construcción para evitar que Cani nutriese de balones a Ewerthon y Diego Milito. El Zaragoza tampoco iba a salir de la cueva. Entre unos y otros aburrieron hasta al esférico en una soporífera primera mitad. Puyol y Márquez se pasaban el balón hasta la extenuación mientras los maños plantaban la línea defensiva en el centro del campo. Todo ello desembocó en un agujero negro. La paciencia extrema de ambos conjuntos provocó que tanto César como Valdés se convirtieran en meros espectadores de una obra para olvidar. Un disparo de Ewerthon y un exceso de egoísmo de Messi al no cederle el balón a Eto'o fueron los únicos alicientes antes del descanso. El Barça se había metido tanto en su papel que acabó adormecido. Falto de la tensión mostrada en Londres, los azulgrana se dejaron ganar terreno. El Zaragoza intentó sacarle partido a la falta de intensidad visitante mientras Rijkaard avistaba el cansancio de los héroes de Stamford Bridge reemplanzando a Van Bommel por Motta. ¡Basta ya! El Barça perdía fuelle a marchas aceleradas posibilitando que el Zaragoza tuviese más posesión. Tampoco importaba quien tuviese el control porque la concatenación de errores era constante. El partido deambulaba por la línea del horror. Rijkaard movía ficha para intentar librar la partida de las tablas. Esta vez Messi, el único azulgrana con chispa, recibía el injusto camino del banquillo mientras Eto'o y Ronaldinho andaban desaparecidos. El camerunés cobró protagonismo cuando tras recibir gritos racitas quiso marchase del partido. La rebelión de Eto'o, evitada por Rijkaard, tomó fuerza instantes después. El córner que el camerunés se negó a lanzar acabó con un lanzamiento de Edmilson a la escuadra atajado con las manos por un Celades metido a improvisado portero. Tras el penalti transformado por Ronaldinho, Eto'o culminó la victoria azulgrana soltando un preciso centro remachado por Larsson. Dos tantos en tres minutos que confirman a los azulgrana al frente de la Liga zanjando una semana de revanchas consumadas.