«Se ha visto a un equiporoto»
«El juego ha sido decepcionante», sentenció al final del partido un enfadado Juan Arias
La aguerrida defensa de los maños fue muy complicada de superar como revela la imagen de Castresana
Sólo hacía falta mirarle a la cara pera ver dos cosas: decepción y enfado. El presidente del Ademar, Juan Arias, no quiso ocultar su frustración por el juego y la imagen exhibida por el equipo y al final no se mordió la lengua. «Esta derrota nos complica mucho la cuarta posición y sobre todo por la forma de jugar el equipo y por la decepcionante actitud de juego. Creo que se ha reflejado un equipo roto, un equipo donde sólo juegan las individualidades y que de equipo tiene muy poco. Entonces está claro que así es muy difícil ganar cualquier partido y que cualquiera nos puede meter en complicaciones como ha pasado este año». A la hora de hablar de la trayectoria durante la temporada, Arias empleó el mismo tono crítico. «Este año hemos mostrado una gran irregularidad en casi todos los partido porque creo que hay poca mentalidad de equipo ganador». El presidente ha advertido en el equipo señales que le preocupan. La principal es la sensación de que la mayoría de los componentes de la plantilla tienen la cabeza en otro sitio; bien en el proyecto ademarista de la próxima campaña o bien en su futuro en otros equipos. Y Arias señala, a modo de aviso a navegantes, que eso no le gusta nada. «Pienso que el equipo quiere ya pasar página y que piensa que se tiene conseguido esta temporada. Sin embargo, me parece que por respeto a la afición y al club se tiene que luchar hasta el último momento y hasta la última gota de sudor», sentenció. Entiende los silbidos «Y en este sentido -añadió el presidente- yo pienso que el equipo no está motivado y le falta ese poder de concentración para luchar por todo. Esta situación me decepciona sobre todo porque he visto algo que pocas veces ha sucedido: los silbidos al final de algunos aficionados. En otras ocasiones, aún perdiendo, se aplaudía al equipo, pero ahora estamos llegando a una situación en que esa misma decepción que yo siento, la percibe también algún sector del público. Un sector que, en cualquier caso, se merece un respeto. Por eso insisto en que el equipo debe luchar a muerte hasta el fin. Ha habido algún silbido y yo reconozco que es algo lógico porque a mí también me ha decepcionado este partido». De todas formas, el presidente ademarista, que tiene previsto reunirse con la plantilla para manifestarles su descontento, quiso también apelar a lo positivo para reclamar un golpe de timón de los jugadores en el último tramo del campeonato. «Siempre que hay vida hay esperanza por lo que espero que el equipo se rehaga y piense que su obligación es seguir luchando hasta junio y dar el do de pecho».