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efe | copenhage

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Ole Hermann Borgan, uno de los jueces de línea que actuará hoy en la final de la Liga de Campeones entre el Barcelona y el Arsenal,se mostró ayer arrepentido de haber posado con la camiseta del Barcelona para el diario Drammens Tidende . El periódico de Drammen, una pequeña villa situada cerca de Oslo, publicó hoy una entrevista con Borgan sobre la final en la que aparece una foto de éste con la camiseta del club blaugrana. «Fue un acto irreflexivo por mi parte, en realidad, una tontería. No debe volver a ocurrir. Independientemente de todo esto, tengo un trabajo que hacer en la final y ninguno de los dos equipos debe dudar de mi imparcialidad», declaró ayer Borgan a la edición digital del diario. El linier noruego negó que fuera hincha del Barcelona y aseguró que no volvería a posar en una foto similar. Actitud «poco inteligente» El presidente de los árbitros noruegos, Rune Pedersen, calificó de «poco inteligente» el posado de Borgan, porque podía poner en duda su imparcialidad, pero no quiso revelar si ello podía acarrear una sanción para el juez de línea. Hermann Borgan y su compañero Steinar Holvik serán los jueces de línea que se encarguen de acompañar al también noruego Terje Hauge durante el partido de la final de la Liga de Campeones que se disputará esta tarde en la capital parisina.

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