España encuentra ante Egipto el camino del gol y mejora su juego
La victoria frente al campeón de África inyecta una dosis de optimismo en la puesta a punto
Aunque careció de continuidad en su juego y sigue con dudas a sólo once días de su estreno mundialista, España cumplió varios de sus objetivos en el ensayo de Elche ante Egipto, un campeón de África reservón y menos fiero de lo que pintaban. Ganó, cerró algún debate sobre Raúl y se reencontró con el gol. Termina su preparación doméstica para la gran cita sin brillo, pero con un triunfo que eleva la autoestima y permite seguir la puesta a punto sin sobresaltos y con alternativas. Esta vez no hubo sorpresas en el equipo titular y Luis apostó por Raúl en lugar de Luis García como única novedad con respecto al choque ante Rusia. Una modificación que, aunque el madridista siga lejos de su mejor versión, mejora las prestaciones de España. Raúl sabe leer el partido como pocos y es el más listo de la clase. Auxilia a sus compañeros, sabe enganchar con el medio campo y con los puntas y, aunque no marcaba con España desde septiembre y con su equipo desde octubre, tiene gol. Fue muy sencillo el que abrió la senda del triunfo ante Egipto, pero había que estar ahí. Fue el capitán quien aprovechó el error del meta egipcio, tras disparo de Antonio López, y no los dos delanteros. Por algo será. Además de sentirse más tranquilos con Raúl en el campo, ya que sus compañeros le consideran imprescindible, los españoles se aplicaron en las exigencias del entrenador. Sergio Ramos y Antonio López, se prodigaron más en ataque, y la distribución de balón tuvo algo más de criterio. Perfecto Senna en la labor de destrucción e irreprochable la actitud y el compromiso de todo el equipo. La zaga sigue sobria y bastante segura, aunque un par de desajustes y un error pueril de Casillas provocaron sustos que no terminaron en gol porque la pegada no es una de las virtudes de los egipcios. Aunque pulió algunos defectos, España volvió a mostrar síntomas de debilidad. Para empezar, la situación de Cesc escorado a la izquierda desorienta al del Arsenal, que pierde contacto con el balón y se siente inseguro, sin protagonismo. Tampoco suena bien lo de Senna y Albelda juntos. Quizá con un tapón defensivo baste. Sobraron también algunas patadas alevosas e innecesarias, que en un Mundial son tarjeta segura. Y arriba, Villa y Torres siguen sin entenderse como debieran. En todo el primer tiempo sólo conectaron una vez, aunque fue una acción maravillosaque no terminó en gol de milagro. Igual que hizo en la segunda mitad de Albacete, Luis apostó por un equipo de más técnica tras el descanso, ya que retiró de un plumazo a Albelda, Senna y Villa y dio entrada a Xabi Alonso, Xavi y Reyes. Bajó el ritmo, pero pronto llegó el gol de la sentencia. Fue una ejecución magistral de un golpe franco por parte de Reyes, un jugador diferente, con desborde y gol, que reclama más minutos. Como suele ocurrir en los amistosos, el carrusel de cambios dificulta la continuidad en el juego y hace más difícil sacar conclusiones. Sí quedó claro que la afición está a muerte con Raúl, al que despidió puesta en pie. Tan resuelta estaba la noche que Casillas decidió darle emoción al regalarle un balón a Terike, que falló de forma clamorosa. Errores así son imperdonables, por más que luego se desquitase con un paradón de los suyos, de reflejos, tras cabezazo de Ali. Todo sigue su rumbo.