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Tomé y la Cultural se reúnen hoy para que el técnico quede libre

El entrenador leonés y la sociedad persiguen la rescisión, aunque primará lo económico. Arkonada afirma que la Cultural es un club que le agrada y Visjnic se deja querer

León

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El entrenador Álvarez Tomé y la Cultural vuelven a reunirse hoy para tratar la rescisión del año de contrato que le queda por delante al técnico leonés. Se trata de llegar a un acuerdo que interesa a ambas partes. Los dirigentes de la sociedad anónima leonesa son conscientes de que la permanencia en el puesto de entrenador de Álvarez Tomé sólo se debe a que tiene un año más de contrato firmado con el club culturalista. De lo contrario, no seguiría ligado a la entidad futbolística leonesa. Álvarez Tomé también lo sabe y conoce que su permanencia forzada en el cargo le supondrían más trabas que facilidades durante el año que todavía tiene de contrato por delante. Las dos partes parece que están condenadas a entenderse, porque de lo contrario la Cultural sería la más perjudicada. Si el técnico Álvarez Tomé se amarra a su año de contrato para cobrar de la Cultural una cantidad determinada, dejaría las puertas cerradas para su vuelta en un futuro al club leonés. Pese a las influencias interesadas que tiene el entrenador leonés para que cobre todo lo que señala su contrato, aunque no dirija al equipo la próxima temporada, Álvarez Tomé conoce que una negociación forzada podría pasarle factura tanto como si se queda como si decide abandonar el club leonés para fichar por el Zamora. El Zamora, a la expectativa El presidente del club rojiblanco, José María Casas, única candidatura presentada a las elecciones, ha reconocido su interés de fichar a Álvarez Tomé para iniciar un nuevo proyecto, «siempre y cuando se desvincule de su actual club, la Cultural y Deportiva Leonesa. Álvarez Tomé es un entrenador que dejó un buen recuerdo en el Zamora y con el que mantengo muy buena relación». La permanencia de Álvarez Tomé al frente del banquillo de la Cultural no gustaría a buena parte de la afición culturalista, debido a que la temporada que acaba de finalizar fue la peor del equipo leonés desde que se produjo el descenso a Tercera División. Álvarez Tomé comenzaría un nuevo proyecto sin la aprobación de la hinchada. El técnico leonés lo sabe y seguramente hoy trate de tensar una negociación para llevarse parte del dinero del contrato, más influenciado por ex cargos de la entidad que por su convencimiento personal.