«Se lo dedico especialmente a esta maravillosa afición»

Uno de los hombres más felices ayer en el Estadio José Rico Pérez de Alicante era el presidente de la Deportiva, José Fernández Nieto. Razones tenía para ello porque en sus siete años de mandato ha conseguido convertir a un conjunto blanquiazul que luchaba por no descender la categoría que había conquistado recientemente en una de las escuadras más potentes de la Segunda División B gracias lo cual ha logrado dar el salto al fútbol profesional español. Por si no era suficiente con esta sorprendente transformación deportiva, Silvano puede presumir de haber saneado economicamente a una sociedad que tomó en números rojos gracias a una gestión caracterizada por la sobriedad presupuestaria y el excesivo celo en el control de los gastos. Ello no ha sido óbice para formar plantillas cada año más competitivas que a la postre le ha permitido dar el salto a la categoría de plata del fútbol español. -¿De quién se acuerda en estas horas de felicidad? -Evidentemente pienso en mi familia, en mis hijos y mi mujer, en mi madre y también pienso en mi padre que se fue en esta etapa en la que yo era presidente, también de mis amigos que están cerca en los momentos difíciles y especialmente a uno que me mandó un mensaje de ánimo después de la derrota con el Alcalá y que desgraciadamente ya no lo volví a ver porque se nos fue en la carretera horas más tarde, como era David, en fin a mucha gente que sería imposible de relatar aquí en tan poco espacio. -Y es que son muchos los que se merecían una alegría así ¿no? -Por supuesto y ahora que pienso en ello yo me alegro especialmente por una persona que se ha convertido en uno de mis más fieles colaboradores en esta etapa como es Jesús Tartilán, es una persona humilde, trabajadora, que sabe muchísimo de fútbol y siempre está en el último plano que nunca quiere ser protagonista de nada y hoy es un día especial para dedicárselo porque una gran parte de lo que hemos conseguido se lo debemos a él. -Cuando llegó a la presidencia reconoció que su sueño era poder ascender algún día a Segunda ¿cómo se siente ahora que ha convertido su sueño en realidad? -Pues creo que debo ser el hombre más feliz del mundo porque este era uno de los retos más ambiciosos que me había trazado y por fin lo hemos conseguido, me siento feliz porque además sé que hemos hecho felices a mucha gente y eso es más importante todavía. -Habla de un reto conseguido ¿cuál es ahora el objetivo? -Yo me había propuesto en primer lugar conseguir sanear el club y eso ya está logrado, después fijamos el objetivo en conseguir el ascenso a Segunda División y también lo hemos alcanzado y ahora me propongo dotar a la Ponferradina de un patrimonio que en estos momentos no tiene y eso pasa por conseguir jugar en un estadio propio y unas instalaciones deportivas que sean patrimonio de la entidad, estoy hablando de la construcción de una ciudad deportiva que es una de mis grandes ambiciones. -Y siendo tan ambicioso como es usted, ¿no le asaltará la idea de conseguir otro nuevo ascenso pero esta vez a Primera División? -Eso sería muy bonito pero primero tenemos que meditar seriamente sobre el futuro porque no todo en la vida es fútbol y ya son muchos años trabajando duro por la Ponferradina, descuidando quizá un poco a mi propia familia, incluso cediendo tiempo del que debería dedicar a mis negocios, a lo mejor se necesita un cambio y quizá cuando se cumpla ese tercer reto que he dicho antes.. -Esto suena a despedida... -No, no, digo que cuando se cumplan esas tres promesas sería un buen momento para poder irme a casa con la satisfacción del deber cumplido pero ahora hay que seguir en la brecha. -¿Está capacitada Ponferrada para soportar un equipo en Segunda División? -Eso está claro, pero ahora todo depende del grado de apoyo que tengamos por parte de las empresas e instituciones -Algunos prometieron que ayudarían cuando llegara el ascenso ¿habrá que recordárselo ahora? -Sí pero esa es la típica excusa del que no quiere aportar nada porque lógicamente cuando el club necesita apoyo es cuando estás en el pozo que es la Segunda B, lo cual no quiere decir que no aceptemos las aportaciones que puedan llegar ahora. -¿Cuál será el objetivo deportivo del próximo año y en qué cantidades se moverá el presupuesto, si es que ha pensado en eso? -Hombre yo creo que lo primero será intentar mantenerse en la categoría y para eso tendremos que manejar un presupuesto de 500 o 600 millones de pesetas porque el resto de los clubes tendrán mucho más, al menos la mayoría. -¿Cuál sería la masa social ideal para andar bien por Segunda? -Si estamos hablando de que habría que triplicar el presupuesto pues tendríamos que experimentar un prespuesto similar en cuanto a socios, es decir, entre ocho y nueve mil socios. -Lo que pasa es que la capacidad real del estadio es de 5.607 espectadores ¿cómo se pueden tener 3.000 socios más de las personas que caben en el campo? -Está claro que el Ayuntamiento tiene una labor importante que realizar ahí, el Toralín está preparado para ser ampliado en 2.000 personas más pero yo abogaría por llegar a un aforo de 10.000 espectadores, estoy seguro de que el Ayuntamiento se mostrará receptivo ante esto. -Cambiando de tercio, ¿no podemos asegurar que Pichi Lucas seguirá el próximo año en el equipo? -No, yo creo que ahora mismo es el momento de disfrutar y celebrar lo que hemos conseguido, hemos hablado con anterioridad como es lógico pero él siempre me ha dicho que estaba centrado en buscar el ascenso y que ya habría tiempo de tratar su continuidad, yo le entiendo y es lógico además porque es una persona que estuvo muy cuestionada al principio y él tendrá su propia visión de este tema, nosotros lo único que tenemos es que agradecerle lo que ha hecho porque nadie antes en los 84 años de vida del club había logrado algo así.