La Deportiva acapara cuatro premios en la Gala del 2005

La Sociedad Deportiva Ponferradina fue el club más laureado en el transcurso de la III Gala del Deporte Ponferradina celebrada anoche en el Teatro Bergidum de la capital berciana. Se llevó cuatro de los once premios que se repartieron, directa o indirectamente. El propio club recibió el galardón a la mejor entidad deportiva del año 2005, recogido en el estrado por el vicepresidente Manrique Alonso. Además de este premio que reconocía la extraordinaria temporada que no se pudo refrendar finalmente con el ascenso, aunque sirvió para alcanzar el título por vez primera en Segunda División B, también resultó distinguido el presidente, José Fernández Nieto, en calidad de dirigente más destacado. Su buen amigo Marcelino Alonso Maté, presidente de la Federación de Castilla y León de Fútbol, le hizo entrega de la distinción. Silvano le dedicó este premio a sus compañeros de junta directiva y de manera especial a los desaparecidos Manuel Samprón y Santiago de Castro, en medio de una gran ovación. Por si no era suficiente, también se reconoció el buen trabajo del hombre que llevó las riendas técnicas en la pasada temporada. Miguel Ángel Álvarez Tomé, ahora ya entrenador del Zamora para la próxima campaña, volvió a Ponferrada para recoger un trofeo ganado a pulso porque nunca antes el equipo había obtenido el título de campeón en Segunda División B ni tampoco se había ganado el derecho de disputar una promoción de ascenso a Segunda A. Tomé, que recibió la estatuilla de manos del concejal de Deportes, Emilio Villanueva, deseó suerte a la Ponferradina e hizo votos porque pronto esté luchando por el ascenso pero esta vez a Primera División «otras ciudades con menos habitantes y tradición futbolística ya lo han logrado y soñar resulta barato» comentó el ex técnico blanquiazul. El último de los premios relacionados con la Deportiva, aunque cronológicamente fue el primero de la noche, correspondió a un jugador de la cantera, concretamente a Luis Valcarce Vidal, como mejor deportista de base. El zurdo apunta buenas maneras y ya ha demostrado que tiene una proyección increible en ese dream team donde también juega su hermano gemelo que tanto está dando que hablar. El chico, eso sí, fue parco ante el micrófono y el auditorio que le ovacionó sobremanera cuando apenas acertó a decir «gracias a todos». Fue la anécdota de una jornada feliz para el club que seguramente se repetirá con mayor amplitud de galardones en la cuarta edición tras el reciente ascenso.