La veteranía manda en los clubes españolesalahoradelos fichajes

Los grandes clubes centran sus miradas en las apetecibles plantillas de los equipos italianos implicados en el escándalo de amaño de partidos. Se especula sobre el futuro de jugadores cuya relevancia se expresa en cheques con una larga serie de ceros, al alcance tan sólo de unas pocas entidades. El resto de contendientes en la competición española han fijado sus aspiraciones en futbolistas que, lejos de las aventureras apuestas de campañas anteriores, acreditan una hoja de servicios muy amplia. Lejos de acomplejarse por su recién recuperada condición de novato, el Levante trata de apuntalar un proyecto que le afiance entre la elite. Para ello contrató los servicios de Frederic Dehu, central que roza los 34 años, y que en su ficha profesional presenta 15 campañas en la máxima categoría futbolística, repartidos entre el Lens, Paris Saint Germain, Olympique de Marsella y Barcelona, sumando, cinco convocatorias con la selección francesa. Además, la línea media levantina disfrutará de la profesionalidad de Damiano Tommasi, un fajador que a sus 32 años deja el Roma. Allí demostró su fidelidad a la 'rossa'. Tras permanecer parado un año por una lesión de rodilla, volvió a la competición cobrando el salario mínimo. Demostró que no estaba cojo y se convirtió en una de las piezas claves de la sensacional temporada realizada por la entidad romana. Si la permanencia supone el reto inmediato para los levantinos, hay otros equipos que, una vez alcanzada esa estabilidad, tratan de proseguir su crecimiento dentro de la Primera División. Es el caso del Getafe que ha querido fortalecer su portería con un nombre contrastado. Roberto Abbondanzieri, 33 años, 12 de profesional repartidos entre Rosario Central y Boca Juniors, fue el titular indiscutible con la albiceleste durante el Mundial. Por su parte, el Sevilla se ha fijado en la pareja de baile de Gravesen en la selección danesa. El madridista forma una interesante pareja en el centro del campo con un tipo rubio, que carece del alevoso ímpetu de su colega. Christian Poulsen casi firma por el Villarreal y el Milan antes de decidirse por el campeón de la Copa de la Uefa, el Sevilla, que intenta construir un bloque capaz de competir por los mayores éxitos. Igualmente, el Zaragoza orientó sus esfuerzos en la adquisición de un jugador que, en sus inicios en River, apuntó maneras que hicieron presagiar un camino plagado de logros. Andrés D¿Alessandro llega a la capital maña tras un periplo desafortunado por Alemania. Nunca cuajó en un país cuyo ideal balompédico no se asemeja al que le había hecho como uno de los grandes valores argentinos. En Wolfsburgo no convenció y aceptó una cesión en invierno al Portsmouth, donde no mejoró. Ahora se le abre una puerta que, a sus 25 años, no debería dejar que se cerrara.