La Deportiva de Segunda División ya ilusiona a sus incondicionales

La SD Ponferradina 2006-2007 ya está en marcha. A las siete y media de la tarde de ayer comenzaban a corretear los jugadores de la plantilla de esta temporada por el bien cuidado césped del Toralín. El equipo saltaba al campo en medio de una ovación de gala, ovación que se repetiría cada vez que el grupo de futbolistas pasaba corriendo por delante de la tribuna. Los 21 jugadores que se dieron cita en el estadio fueron los siguientes: los porteros Sierra y Rubio; los defensas Chupri, Bornes, Fuentes, Robles, Kevin Debrís y Toñín; los centrocampistas Úriz, Fran, Jotha, Robles, Javi Recamán, Asier Salcedo, Nacho Fernández y Gorka Soria; y los delanteros Rubén Vega, Guille, Diego Ribera, Ramón Pereira, Risso y Carletes. El entrenador se mostró ilusionado con la nueva categoría y con el plantel que tiene. «El grado de implicación de la gente vuelve a ser muy alto. De momento hemos traído los jugadores que queríamos dentro de las posibilidades económicas del club. Faltan otros futbolistas que vendrán en los próximos días. Lo del interior izquierdo está próximo, pero también ha de venir un central y otros en varias posiciones». Lucas también tuvo palabras para la grada. «Yo sé que los aficionados van a estar tanto o más invoclucrados que el propio equipo. No es fácil desplazar tanta gente como ocurrió el el play off y fueron un punto fundamental en el ascenso de categoría. Sabemos que no nos van a dar la espalda y contamos con su aplauso durante toda la temporada». Sobre refuerzos, Lucas piensa que la zona de vanguardia está bien cubierta. «En la delantera tenemos muchos efectivos; suficientes como para derrotar a un acorazado. La pretemporada va a ser dura. porque el club lleva una desventaja con respecto al resto y por tanto habrá sesiones dobles y triples encaminadas a la puesta a punto. Pavone se despidió Antes de empezar el primer entrenamiento de la pretemporada, Gonzalo Pavone llegaba a un acuerdo con el club para rescindir su contrato. Le quedaba un año, pero en esta campaña jugará en el Logroñés CF. El argentino no sólo demostró ser un gran jugador, sino también mejor persona. Sin guardar rencor a nadie, Pavone fue a despedirse de los técnicos y de los que fueron suis compañeros. Luego atendió amablemente a la prensa y al marcharse recibió la ovación de las más de 250 personas que había en la grada. Pavone dejó seis goles en la Liga 2005-2006, muchos de ellos decisivos y que dieron a la Deportiva puntos importantes para poder llegar a la fase de ascenso. «Aquí no me iban a tener en cuenta para este año e intentaré pelear en Logroño como en la Deportiva. Me voy con los mejores recuerdos de Ponferrada. Estoy muy agradecido a todo el mundo. A uno le duele irse cuando está a gusto en un sitio y a mí y a mi familia nos han tratado fundamental aquí. Seré seguidor de la Deportiva toda la vida y en cuanto pueda vendré con mi familia a ver algún partido». Quien estaba como niño con zapatos nuevos era Guille. El andaluz regresa «con muchas ganas de hacerlo bien para que vuelvan a quedar contentos conmigo. Yo estaba como loco por venir. Había interés por las dos partes y no ha habido mucho tira y afloja». Guille no promete goles, pero sí trabajo. «Ganas las máximas. Goles no puedo prometer, porque esto es Segunda y es muy complicado. Pero voy a trabajar. Tampoco tengo demasiada experiencia en Segunda».