La Cultural disfruta de un día de convivencia en Cistierna haciendo rafting
El jugador llega al conjunto trepalense procedente del equipo extremeño del Villanovense
Edgar, a la derecha, en su etapa como jugador de la Cultural
La plantilla de la Cultural y Deportiva Leonesa disfrutó ayer de un día de descanso y convivencia en Cistierna practicando el deporte del rafting. Tan sólo el portero Álvaro Mártinez Beltrán, la última incorporación del equipo blanco procedente del San Isidro canario, se quedó en León para continuar ejercitándose en solitario buscando su puesta a punto, para ponerse a la altura de sus nuevos compañeros, que llevan desde el día 17 de julio pasado realizando la pretemporada. Antonio Gómez, entrenador de la Cultural, volverá a recuperar hoy el ritmo normal de entrenamientos, todo ello antes de afrontar mañana, a partir de las 19.30 horas, un nuevo encuentro de preparación frente a La Bañeza, que esta campaña dirige el técnico zamorano Miguel Ángel Nuevo, en el estadio de La Llanera bañezano. Refuerzo del Huracán Edgar García Miranda, conocido en el mundo del fútbol por Edgar, es desde ayer nuevo jugador del Huracán Z. El nuevo componente de la plantilla trepalense se desenvuelve en la posición de interior izquierdo, aunque también puede jugar en la banda, como ya hiciera en el Promesas Ponferrada. Edgar, que cuenta con 28 años de edad, nació un 28 de diciembre de 1977, tiene una dilatada trayectoria al haber militado en el Atlético Astorga, La Bañeza, Cultural B, Cultural, Marino de Luanco, Guijuelo, Promesas Ponferrada y Villanovense. Con el Guijuelo disputó la liguilla de ascenso a la categoría de bronce, siendo el autor del gol que dio el pase a la Segunda División B al conjunto charro por vez primera en su historia. Con el Villanovense se proclamó campeón del grupo 14 de la Tercera División, con el que también logró el ascenso tras eliminar al Alcázar (4-1) y al Motril (3-0). El nuevo jugador huracanista, que también fue pretendido por el Atlético Bembibre, se decantó por la entidad azulona, «por proximidad geográfica, voy a vivir en Trobajo del Camino, y por mis nuevas condiciones laborales. Del Huracán Z como club sé muy poco de él. Sólo conozco a Roberto Canuria y a algunos compañeros que coincidieron conmigo en mi etapa del Promesas Ponferrada».