Morientes se destaca en Atenas y endosa tres goles al Olympiacos
Morientes se destapó en Atenas, en el estadio que acogerá la final de la Liga de Campeones, donde el Valencia tuvo el comienzo soñado, con un resultado contundente, para firmar la primera victoria de su historia en tierras griegas. Morientes marcó tres de los cuatro goles de un Valencia intermitente, que sufrió altibajos y cometió numerosos errores defensivos ante el animoso Olympiacos, pero que se mostró demoledor en ataque y se ha ganado de nuevo el respeto en Europa. Con Morientes y Villa este Valencia tiene pólvora arriba. El Olympiacos se convirtió en la primera víctima del oportunismo y la pegada del delantero extremeño, que fue la figura un partido extraño en el que el Valencia fue conformista y sólo reaccionó cuando los griegos marcaron sus goles. Le costó al Valencia entrar en el partido, y necesitó verse abajo en el marcador para jugar y demostrar su superioridad ante un Olympiacos que cuando fue valiente y apretó consiguió su objetivo en forma de goles. Salió temeroso el Valencia, cedió excesivo terreno en los primeros minutos y pronto le tocó sufrir ante los griegos, que espoleados por su público llegaron en demasiadas ocasiones a las inmediaciones de Cañizares, hasta que abrieron la lata, con merecimiento, al filo de la media hora. Lo mismo le ocurrió al Valencia en el segundo periodo, cuando fue incapaz de dominar en el medio campo y se vio superado por el empuje de un equipo lanzado al ataque que dejó en evidencia a la defensa liderada por Ayala.