Tópalov es incapaz de superar la muralla defensiva de Krámnik

El búlgaro Vesselín Tópalov fue ayer, una vez más, incapaz de superar la muralla defensiva tendida por el maestro ruso, Vladímir Krámnik, en la séptima partida del campeonato del mundo absoluto de ajedrez. Tras un día de descanso, Krámnik desplegó en la jornada de hoy una defensa eslava que se perfiló impenetrable para Tópalov que, a pesar de abrir con blancas, tuvo que firmar las tablas tras 60 movimientos. Esta es la cuarta ocasión en la que ambos ajedrecistas firman tablas desde el comienzo del torneo el pasado 23 de septiembre en Elista, capital de la república rusa de Kalmikia. Por el momento, Tópalov no ha podido aún derrotar a Krámnik en el tablero y únicamente obtuvo un punto en la quinta partida por incomparecencia del ruso. De esta forma, Krámnik sigue dominado el torneo por 4 puntos por 3 puntos del campeón búlgaro. En una nueva muestra de la tensión que rodea al torneo, el entrenador del maestro búlgaro, Silvio Danailov, comparó hoy a Krámnik con el juego informático de ajedrez Fritz. Danáilov sentenció que el maestro ruso repitió el 78 por ciento de los movimientos del juego informático en cinco de las partidas disputadas hasta ahora. El ruso abre hoy El ajedrecista ruso abrirá hoy con blancas la octava partida. El sábado y domingo se disputarán la novena y décima partidas, el martes 10 de octubre la undécima y la última partida se celebrará el jueves 12. En caso de que ambos ajedrecistas sumen seis puntos, el 13 de octubre tendría lugar una muerte súbita de cuatro partidas rápidas de 25 minutos cada una. Si ninguno de los dos jugadores es capaz de romper el empate, se disputarían dos partidas adicionales «blitz» de cinco minutos con diez segundos para cada movimiento. Como último recurso y en el «no va más» del ajedrez, Krámnik y Tópalov se enfrentarían en una «muerte súbita» de seis minutos, que dirimiría al campeón. Como novedad, la bolsa de dinero en juego, que rondará los 2 millones de dólares, se la repartirán ambos maestros a partes iguales, independientemente de quien sea el ganador. El pasado jueves Tópalov abrió la caja de los truenos al acusar a Krámnik de hacer trampas en el baño y dijo que no le daría la mano al principio y al final de cada partida.