Diario de León

Campeón busca rival

E l púgil leonés Héctor Moreira, campeón de España superligero, lleva nueve meses sin pelear por falta de contrincantes y de fondos para la velada. Ahora trabaja en una firma de reformas

Publicado por
Georgino Fernández - león
León

Creado:

Actualizado:

A las ocho de la mañana suena el reloj. Sin embargo, el timbrazo del despertador no marca el inicio de una jornada de entrenamientos en el gimnasio, sino que es el aviso para desayunar, ponerse la ropa de trabajo y marchar al curro . Así arranca un día cualquiera desde hace algunas semanas para el púgil leonés, Héctor Moreira, campeón de España en la categoría de los superligeros. La falta de rivales y de combates le ha obligado a buscarse un trabajo. «Si no hay combates hay que trabajar. Yo también tengo que comer», dice Moreira sin rodeos. «A otros no sé, pero a mí no se me caen los anillos por tener que trabajar», añade. Encontró un empleo en una firma local especializada en realizar reformas en viviendas y en fincas. «Hago un poco de todo, de lo que se necesite», dice Moreira que antes de dedicarse al boxeo profesional fue carpintero metálico. «Cuando empecé en serio en esto del boxeo -recuerda- dejé aquel trabajo, pero por desgracia las cosas no me han salido como yo esperaba». Moreira trabajó duro pensando en ser campeón de España. Lo logró en Madrid hace algo menos de dos años pero parece que en su categoría las buenas bolsas no abundan. En estos momentos lleva nueve meses sin pelear. Los rivales no aparecen, algunos incluso da la impresión de que le rehuyen. Y para mayor infortunio las instituciones públicas de León no apuestan por el boxeo, aunque Moreira sea el actual campeón de España de los superligeros. Inicialmente, la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de León le había prometido respaldo para hacer una segunda defensa de su título en las pasadas fiestas de San Juan pero al final todo quedó en nada. Aquella velada nunca se celebró. «A veces da la impresión de que en León sólo hay dinero para el fútbol, el balonmano y el baloncesto», comenta con pesar su entrenador, Alfredo Arrojo. Desde que Moreira, conquistase el nacional siempre quiso defender su cinturón en casa. Lo consiguió en su primera defensa en una velada al aire libre en la Plaza Mayor, en junio de 2005, cuando fulminó por la vía rápida al canario David Pulido. Aquel fue su penúltimo combate. En febrero pasado conquistó el título transcontinental ante el venezolano Pedro Verdú. Ese fue el último. «Este año sólo llevo una pelea y el año pasado fueron únicamente dos. Eso es demasiado poco», asegura el boxeador leonés que siempre pensó que aunque complicado, podría vivir dignamente del boxeo profesional. Y más siendo campeón de España y aspirando a pelear algún día por el entorchado europeo. «Pero para eso hace falta experiencia, coger muchas tablas, progresar como boxeador y eso sólo se consigue con veladas profesionales. Pero para hacer una buena velada hay que poner dinero encima de la mesa. Todo reside en el dinero, por eso nos gustaría contar con más apoyos», indica Alfredo Arrojo. El pasado mes de octubre un promotor gallego pujó por el título nacional y se lo llevó a Galicia. Moreira iba a pelear con el gallego Tito Bestilleiro por el título nacional pero al final su rival se lesionó en un codo y la velada se suspendió. Otra nueva desilusión. Moreira reconoce estar decepcionadoaunque se resiste a tirar la toalla. «En ocasiones de cabreo he llegado a pensar en dejarlo todo pero luego se me pasa». Ahora, sigue entrenando y acudiendo a diario al gimnasio Master 10. «Antes sólo me dedicaba a boxear y a entrenar pero ahora sólo entreno dos horas por la noche, de ocho a diez, para mantenerme en forma y ayudar a la gente amateur. Puede decirse que ahora estoy a un 40 o 50%». Cuando sólo se dedicaba a boxear, Moreira pasaba un mínimo de cinco horas diarias entrenando. «Pero ahora no puedo trabajar mis ocho horas y luego ponerme a entrenar otras cinco», sentenció. Héctor, en todo caso, espera que esta situación sea pasajera, que las instituciones apuesten por él y que pronto aparezca un rival dispuesto a medirse con él en un ring. «Ojalá que sea así porque me gusta llevar el nombre de León por todos los sitios», deseó.

tracking