Los jugadores de la Cultural en bloque respaldanal?entrenador

Los integrantes de la plantilla de la Cultural no se andan con medias tintas. La mayoría del vestuario, salvo mínimas excepciones, asegura que está «a muerte con el entrenador Antonio Gómez». Al igual que el técnico vigués ha proclamado a los cuatro vientos en la última semana esa misma expresión, la plantilla le ha hecho llegar sus muestras de apoyo a través de mensajes y llamadas por teléfono móvil. «Estoy orgulloso del grupo de jugadores que conforman esta plantilla porque me lo han demostrado. Cualquiera estaría orgulloso de ello, no sólo yo. Durante el lunes y el martes, los jugadores me expresaron su apoyo incondicional y me insistieron en que estaban completamente seguros de levantar al equipo para devolverle a donde se encontraba en las diez primeras jornadas del campeonato», declara el entrenador culturalista. El vestuario de la Cultural se mantiene unido en unos momentos en los que en otros equipos hubiera estallado una revolución. «Las fugas en una plantilla con un número elevado de jugadores suelen producirse cuando las cosas no van bien. Me ha sucedido en otros equipos, en que cuando no funcionan los resultados, cada cual es egoísta y busca sus propios intereses. Aquí no, el vestuario está muy unido», asegura Gómez. Los futbolistas, por su parte, apoyan al entrenador, salvo alguna excepción. «Es lógico que algunos futbolistas que no suelen disfrutar de excesivos minutos de juego no estén contentos con la situación, aunque en ningún momento he encontrado pegas por su parte», afirma el entrenador culturalista. «Un gran tipo» El delantero Addison, uno de los futbolistas más importantes del engranaje de Antonio Gómez, no da pie a la más mínima duda: «Antonio Gómez es el entrenador que me ha da do la oportunidad de jugar en Segunda División B, después de militar en el Huracán Z y en el Atlético Bembibre. Estoy a muerte con él porque ha demostrado ser un auténtico profesional y una persona íntegra, de los que no quedan en un mundo tan egoísta y complicado como el del fútbol». Uno de los capitanes del equipo leonés, Alberto Negral, siempre se ha mostrado al lado de su entrenador: «Tenemos que levantarnos cuanto antes para volver a ser los que éramos. El entrenador no tiene ninguna culpa de la mala racha de resultados, porque somos los jugadores los que tenemos que sacar esto a flote. El vestuario está muy unido y existe un gran respeto por el entrenador porque es un gran tipo», dice el futbolista. El uruguayo Nathaniel Revetria, que en teoría podría ser uno de los más críticos con el entrenador (porque en vez de jugar como delantero centro lo ha hecho en la mayoría de las ocasiones en las que ha disfrutado de minutos como mediocentro) mantiene sin embargo: «Antonio Gómez es un magnífico entrenador y mejor persona. Trata a todo el mundo con una educación exquisita. Me pidió ayuda porque no tenía hombres para jugar en la posición de mediocentro y le dije que podía contar conmigo aunque fuera de portero». Cristian Alberdi es otro que se refiere a Gómez como «un entrenador dialogante y un gran conocedor del mundo del fútbol. Iría con él al fin del mundo. De hecho, estoy en la Cultural gracias a que él me convenció». Diego Cascón, el goleador de la Cultural, apunta con respecto al vestuario y la situación de Antonio Gómez: «Mi relación con el entrenador siempre ha sido buena. Ha confiado en mí desde el principio y sólo tengo palabras de agradecimiento. Ha sabido mantener el vestuario unido en unos momentos malos en cuanto a resultados se refiere».