Los «pelotazos» más rentables

Los clubes de fútbol han encontrado un nuevo filón para mantener la bonanza de sus cuentas y se han apuntado al mercado inmobiliario, a la venta y recalificación de sus vetustas y extensas instalaciones deportivas. La imagen en esta nueva forma de financiación es el Real Madrid. La venta de la antigua Ciudad Deportiva supuso una inyección de 500 millones para las paupérrimas arcas blancas. Con este dinero y la nueva política de Florentino Pérez, el equipo blanco construyó el complejo deportivo de Valdebebas y trajo a los 'galácticos'. Cuando compró Santiago Bernabéu los terrenos en 1967, el presidente blanco abonó sólo 11 millones de pesetas. El ejemplo del 'pelotazo' blanco ha cundido en el resto de equipos, como en el eterno rival. El Barcelona sueña con tirar el Mini Estadi y el Palau Blaugrana y construir un nuevo pabellón al más puro estilo americano, viviendas y oficinas. Todos los equipos se irían a la nueva ciudad deportiva de Sant Joan Despí. Unos ingresos que pueden ascender a 120 millones y que permitirían la ampliación del Camp Nou hasta los 110.000 espectadores, todos sentados. Campos nuevos Los equipos grandes han usado las concesiones de hace muchos años para ahora construir sus fábricas de jugadores en las periferias. Pero los estadios en las afueras de antaño se han convertido en mastodontes en medio de la ciudad y en unos lugares deseados para construir. Así lo vio el Espanyol hace una década, que vendió el antiguo Sarriá para poder pagar sus millonarias deudas. Los 'pericos' juegan desde entonces en Montjüic, pero a partir de 2005 disputará sus encuentros en un nuevo campo situado entre Cornellá y El Prat. Tendrá una capacidad de 40.000 espectadores. Los terrenos donde se levanta el nuevo campo innominado (la directiva blanquiazul busca una empresa que ponga dinero para bautizarlo) costaron 1,5 millones. El estadio, 54 millones, que se sufragarán con el alquiler de las zonas comerciales adyacentes. Algo similar hará el Valencia, que ha conseguido que el Ayuntamiento recalifique el terreno para tirar Mestalla y construir un nuevo campo. Además, se levantarán 27.000 viviendas, con lo que el beneficio del equipo 'ché' puede ascender a unos 100 millones de euros. Al igual que el Espanyol y el Murcia, gracias a las tiendas de alrededor. Incertidumbre El Atlético de Madrid vive también en una situación de incertidumbre. Las obras en la circunvalación madrileña (M-30) y el empeño del alcalde Alberto Ruiz Gallardón de recuperar la orilla del río Manzanares han dificultado el futuro del estadio. Parte de la afición no quiere saber nada de un traslado. Aduce que el Vicente Calderón es el único patrimonio tangible del club, sin contar el traspaso de jugadores, y desconfía de los actuales propietarios (la familia Gil y allegados). La alternativa, irse al futuro campo olímpico, no atrae a la masa social rojiblanco. El campo sería de propiedad pública, aunque eso todavía se negocia, y ello no convence. La oposición a los actuales rectores, 'Señales de humo', ha insinuado en varias ocasiones que el estadio ya está vendido y que de esta manera se han pagado los fichajes de la presente campaña, con los 23 millones de euros por Agüero a la cabeza. Real Madrid La venta de la antigua Ciudad Deportiva supuso una inyección de 500 millones para las paupérrimas arcas blancas. Una iniciativa impulsada por el anterior presidente blanco, Florentino Pérez. En todas las divisiones Las obras de demolición del viejo Tartiere en Oviedo dejaron en pleno centro de la ciudad un solar enorme. Barcelona El Barcelona sueña con tirar el Mini Estadi y el Palau Blaugrana y construir un nuevo pabellón al más puro estilo americano. Esta operación le permitiría ampliar el Nou Camp hasta 110.000 espectadores. El Calderón Otro estadio con proyectos de ser derribado. Mestalla Obras de remodelación en el campo del Valencia