La Marea Roja vuelve en enero

Baloncesto León abre mañana la segunda vuelta de la liga y lo hace a lo grande. Contra todo un Manresa, un equipo que tiene en sus vitrinas títulos como una Liga ACB o una Copa del Rey. Y para esta ocasión el equipo quiere recuperar la Marea Roja, el espíritu de las grandes citas por lo que convoca de nuevo a sus aficionados para que acudan mañana al Palacio de Deportes con prendas de color rojo. Será la primera Marea Roja de la temporada en una jornada extraña, en la que el equipo leonés intentará recuperar el ritmo tras el parón navideño y que coincide con los días aún festivos de la Navidad. El equipo repartirá 1.500 tak-tak a los aficionados que acudan más temprano al Palacio de Deportes para presenciar el partido que arrancará a las 20.45 horas. Además, el club repartirá en las entradas del pabellón y en el hall del recinto deportivo ejemplares de un nuevo número de la revista oficial del club «Canasta» y abrirá la ludoteca infantil Divernodia, que en principio está reservada para los partidos que se juegan los sábados o los días festivos. En lo deportivo el equipo entrena con normalidad y a un ritmo intenso. El entrenador Gustavo Aranzana quiere que sus jugadores aparquen mentalmente cuanto antes las vacaciones y está aprovechando estos días para trabajar nuevos recursos táctictos para poder emplearlos en la segunda vuelta de la liga. El pívot estadounidense Terrence Leather ya trabaja con el resto del equipo tras superar los problemas de espalda que le impidieron disputar el pasado sábado el partidillo que enfrentó a Baloncesto León contra el Ciudad de Palencia. Por su parte, el base francés Dumas también entrena con normalidad desde el día 28, cuando el equipo concluyó el parón invernal, aunque aún acusa una cierta de falta de ritmo porque casi acumuló veinte días parado, al enlazar los problemas de migrañas con las vacaciones invernales. El que avanza de día en día en su acoplamiento al equipo es el pívot estadounidense Rick Hughes, que optó por no regresar a su país durante el parón y aprovechó para seguir mejorando su situación física trabajando con el segundo entrenador del equipo Javi de Grado. Por su parte, el rival de mañana, el Manresa también regresó ayer a los entrenamientos con doble sesión tras descansar el fin de semana. Hoy viajará hacia León para entrenará a las ocho y media de la tarde en el Palacio de Deportes. Mañana también tiene hora en el recinto a las doce y media de la tarde para ultimar la preparación del partido que comenzará a las 20.30 horas con arbitraje de Avilés Antón y Labrac Naranjo. Mientras, la última incorporación del Tenerife Rural, el alero estadounidense con pasaporte alemán Jason Klein, pidió ayer paciencia por su prolongada inactividad y sostuvo que tanto él como Omar Quintero no se suman al equipo «como estrellas», papel que reservó para Antwain Barbour y Duane Virgil. Jason Klein comentó durante su presentación como nuevo jugador blanquiazul que necesita «un poco de tiempo» para estar a su mejor nivel, según dijo, aunque dejó claro que si Rafa Sanz lo estima conveniente debutará esta semana.