| Crónica | El futuro del club merengue |
Juicio a la presidencia blanca
El Real Madrid celebra la vista oral en la que se decidirá si se mantiene el actual sistema de voto por correo en las elecciones, lo que significaría un cambio en la cúpula directiva
Hoy se celebra el juicio que decidirá si se mantiene el actual sistema de voto por correo en las elecciones del Real Madrid, lo que significaría, en teoría, un cambio en la presidencia, o si se suprime el artículo XV de los Estatutos del club, en cuyo caso los sufragios a distancia quedarían anulados y Ramón Calderón podrá continuar en el cargo con el respaldo de los tribunales. De cualquier manera, aunque la vista oral y sus consecuencias marcarán el futuro del Madrid, la sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 47, que se conocerá en un plazo de entre dos semanas y un mes, es recurrible. Así, Calderón tendría la posibilidad de mantenerse en el sillón presidencial al menos hasta el final de temporada, a la espera de convocar nuevas elecciones dada su situación de provisionalidad. Además, el presidente madridista también presentó una denuncia por la vía penal en el Jugado de Instrucción número 25, en el que están depositados los 10.511 votos emitidos por correo, con el objetivo de alargar aún más el embarullado proceso que ha convulsionado las estructuras de la casa blanca. Con motivo de las demandas presentadas contra el Real Madrid por el propio Calderón y por Arturo Baldasano, la juez Milagros Aparicio escuchará hoy a las partes implicadas y deberá resolver si deben recontarse o no los votos por correo, lo que llevaría a la presidencia, aunque posiblemente sería a largo plazo, a Juan Miguel Villar Mir, aunque la candidatura de Juan Palacios ahora encabezada por Fernando Fernández Tapias también aspira a ello. Calderón ganó las elecciones del 2 de julio con 8.344 votos, por delante de Palacios (8.098) y Villar Mir (6.702), pero la candidatura del empresario que acudió a las urnas junto a Carlos Sainz asegura que dispone de más de 4.000 sufragios que le garantizan el triunfo. El actual presidente, sin embargo, insiste en que el juicio no tendrá ninguna trascendencia, pese a que si la juez decide la viabilidad del voto por correo el recuento debería hacerse efectivo por parte de la Junta Electoral. El asunto se complica aún más porque la última asamblea del Real Madrid, el órgano soberano del club, acordó mantener el vigente sistema del voto no presencial, muy a pesar de Calderón, ya que los socios rechazaron una de sus principales propuestas electorales. La Audiencia fallará después El fallo de la Audiencia Provincial, que se reunió para deliberar el pasado jueves sobre el recurso de Villar Mir contra la suspensión cautelar del voto por correo, también quedará a expensas de lo que suceda en el juicio, al que comparecerán todas las partes implicadas y los testigos que han sido citados: directivos, ex directivos, empleados del club y miembros de la Junta Electoral. Aunque la pasada semana se anunció que la Audiencia dejará sin efecto la suspensión cautelar del sufragio por correo por considerar que fue lesiva con la voluntad de los votantes, Calderón y su directiva consideran que la decisión será favorable a sus intereses al haber existido irregularidades, con presunta venta, intercambio o destrucción de votos a distancia. Ramón Calderón solicitó a la juez que a partir del 26 de junio, seis días antes de las elecciones, se suspendiesen los votos emitidos por correo, y posteriormente que se anulasen por supuesto fraude todos los sufragios que llegaron por esa vía. Milagros Aparicio aceptó su primera propuesta, pero no la segunda, y Baldasano, el candidato menos votado (1.581) reiteró después la petición denegada a quien fue el ganador de las elecciones con el sufragio presencial. Quien sin embargo se considera ganador en el correo y, por tanto, legitimado para ocupar la presidencia de forma inmediata, es Villar Mir, quien ya anunciado que, «dada la trascendencia del acto», al término del juicio ofrecerá una rueda de prensa. En todo caso, el asunto es tan complejo y los recovecos judiciales tan numerosos que habrá que esperar, como muy pronto hasta febrero.