La actitud no es cosa de Rubio

El debut de Miguel Rubio en el banquillo culturalista no significó una victoria segura como asevera la máxima futbolística. El equipo leonés volvió a manifestar una falta absoluta de actitud sobre el rectángulo de juego que se reflejó en el marcador final (0-2). El Club Deportivo Logroñés consiguió la victoria sin hacer demasiado sobre el estadio leonés. El ex culturalista Galiano inauguró el marcador en el minuto 10 de partido y Candelas puso la rúbrica en el 72. La Cultural se movió como alma en pena y terminó el partido abucheada por su propia afición. El estreno del técnico catalán como entrenador local no trajo consigo una revolución en la alineación leonesa. Confió en los habituales para recibir al Club Deportivo Logroñés, aunque el equipo volvió a manifestar que no atraviesa por el momento deportivo idóneo. El leonés Alberto Negral ejerció en el lateral izquierdo, debido a que tanto Fran como Casquero no se recuperaron de sus respectivas lesiones. El resto del cuadro leonés apenas sufrió modificaciones con respecto a las alineaciones habituales del resto de la temporada. El Club Deportivo Logroñés, sin demostrar un gran talento deportivo, supo contener el escaso ritmo de juego impuesto por el once culturalista en cada una de las zonas del campo, sobre todo en la parcela ancha. El bloque local apenas gozó de talento para enlazar acciones de peligro sobre la portería rival. Los riojanos paralizaron el juego culturalista con lo más simple. Situaron una fuerte presión sobre la salida de balón desde el medio del campo, sin dejar maniobrar a Fernando López, que se sintió incómodo durante todo el encuentro y falto de acierto. Cristian Alberdi, por su parte, careció de la participación de otras tardes. Se le vio fuera de sitio en muchos momentos del partido y, sobre todo, demasiado acelerado. Las bandas no existieron, porque ni Lalo ni Pesco acertaron a irse de sus respectivos marcadores a lo largo de la confrontación deportiva. El equipo riojano vino a hacer su partido. Arriesgó lo mínimo y se limitó a buscar el área rival a la contra. Antes de que el ex culturalista Galiano inaugurase el tanteador (no festejó el gol y pidió perdón a la afición culturalista), el cuadro visitante había gozado de hasta dos claras oportunidades para batir la portería de Aulestia. Primero Barba y después Omar no acertaron a batir al meta local Aulestia. Con el marcador a favor de los riojanos, el cuadro culturalista no se sintió herido en su orgullo. Siguió con una falta de conducta inusual en un equipo que si por algo se ha caracterizado durante la temporada ha sido por su espíritu de lucha y de sacrificio. Tras el descanso, el conjunto local trató de llegar a la portería con un juego muy espeso. Demasiada lentitud en la medular, una bandas sin desborde y una delantera sin pegada supusieron una muerte anunciada. Nadie quiso tirar del carro. Sólo destacó la casta de Goikoetxea, pero juega de marcador central. Candelas puso el segundo gol para el Logroñés y el sonrojo para un equipo que padece una alarmante falta de actitud sobre el campo.