En Valladolid y en Huelva
ANDA revuelto el río deportivo local. Y ya se sabe que cuando el río está revuelto la ganancia es para los ocasionales pescadores. Mucho ruido, más en el sector institucional, y pocas muy pocas nueces en el deportivo. Cuando tal ocurre hay que sentarse plácidamente -todo lo plácidamente que los nervios dejen a cada cual- y esperar... Prudencia y no cerrar totalmente la puerta a la esperanza. Y es que una nueva jornada está ahí con la Cultural viajando el domingo a Valladolid, para jugar contra el filial vallisoletano, un partido, tres puntos, que pueden trocar, en el semáforo culturalista, por al menos el amarillo, preocupante aún, pero no tanto como el rojo; del rojo al amarillo y del amarillo al verde. Todo es cuestión de que la pelota entre en la red contraria más veces que en la propia. Cierto que en el «aquelarre» que se ha movido el entorno culturalista, es difícil filtrar un rayo de optimismo; pero... Sabido es que la esperanza, siempre la esperanza, es lo último que se pierde. Hubo fumata blanca casi instantáneamente. Apenas Miguel Rubio dio «la espantada», salió el humo blanco de la chimenea culturalista: «Habemos nuevo entrenador». Milo Abilleira; desconocido por estos predios, pero no por los «aires, airiños, aires» del fútbol gallego. No parece haberse asustado oteando el panorama culturalista. Y se ha puesto a trabajar que es la herramienta indispensable para situaciones como la que afronta. Démosle un razonable tiempo de cortesía y de confianza. Siguiendo con lo deportivo, a Climalia León le toca un nada fácil encuentro esta noche a partir de las nueve en el Ciudad de Huelva en la cancha del equipo onubense. Un rival nada fácil, un partido, no obstante, que puede y debe ganar el equipo leonés, a no ser que las celebraciones por el estupendo logro de la Copa del Príncipe hayan «distraído» demasiado a los jugadores de este equipo. Y es que a veces las ramas del optimismo desbordado no dejan ver la densidad del bosque de la realidad. Con todo, el pronóstico, al menos el mío, se inclina por la victoria leonesa, a la espera de volver a ocupar el primer lugar de la tabla, ahora ocupado por el Lobos Cantabria, derrotado, por cierto, con claridad y contundencia en la final de la Copa del Príncipe.