Diario de León
Publicado por
MARRO
León

Creado:

Actualizado:

LA SEMANA PASADA invocábamos una llamada conjuntamente a la imaginación y al sentido de la responsabilidad. Antonio Machado: «De diez cabezas nueve embisten y una piensa» (¿una...?). «Es propio de cabezas mediocres arremeter contra todo aquello que no les cabe en la cabeza». Media neurona sería suficiente para comprender que el poder luchístico ejercido sin imaginación y desde el inmovilismo no puede ofrecer ningún futuro de garantía para la Lucha leonesa. La víctima, una Lucha condenada a languidecer y arrastrarse alucheramente. Todo lo demás, como comentaba un castizo aficionado, pamplinas y milongas colocadas vía presidencial. Pues lo opuesto a imaginación es, ya saben, rutina. Es más de lo mismo. Pero aún, peor que la rutina, es lo ridículo de salir a llenar media página manifestándose sobre las calidades y méritos de los luchadores destacados. Como si en realidad eso fuese lo que verdaderamente interesase al aficionado, como si el presidente de la Federación de Fútbol saliese pronunciándose sobre las virtudes y glorias de Raúl o Ronaldihno. Con ese tipo de caducas declaraciones en clave tan aluchera, se está ocultando los verdaderos y auténticos problemas de fondo de la Lucha leonesa. Los que se deberían afrontar con imaginativa creatividad. Así las cosas, así de mal, la creativa imaginación al poder y sin demora. A lo peor, alejándose de lo quimérico -«Lejos de mí la funesta manía de pensar/imaginar»- se prefiere apostar por la continuidad repetitiva en lo obsoleto en el cutre y chapucero «aluche de la boina». Continuismo es igual a inmovilismo. Justo la cuenta para salir del «tercermundista subdesarrollo aluchero». Un poder sin imaginación que, a más de inmovilista, adolece de una manifiesta pereza organizativa invernal. Perezosa -y peligrosa- hibernación. No le faltaba razón a un lector cuando subrayaba que hasta los modestos bolos leoneses tenían más actividad competitiva invernal. Claro que menos que la Lucha es imposible tener para llenar imaginativamente estas fechas invernales con, eso, imaginación. Falta absoluta de imaginación ¿y de ganas? Frente al poder sin imaginación que se limita a enmascarar -y alardear-, no cabe sino desenmascarar (milongas). Claro que el verano tampoco le fue a la zaga. Los tan escasos como penosos corros juveniles y de Lucha de base ya lo largo del verano, que producen desolación y grima. Los corros dejan sensación cutre en cuanto a presentación y demás, pero al menos va gente. Sin embargo los juveniles e infantiles, además de doble de curtes, resultan desoladores. De nuevo falta de imaginación a añadir a la proverbial pereza y galbana cazurra. Y ésos, esos datos serían los que habrían de incluirse en un balance de la temporada serio y objetivo (ay, la autocrítica...). Nada se aporta ni se soluciona con salir a los medios de declaraciones autojustificadoras (ay, las milongas...) y vendiendo la idea de futuro (ay, el simplismo...) de que ayuntamientos y juntas vecinales aumentan sus presupuestos para los corros. Cuando el problema de la Lucha leonesa, recuerden, es más -mucho más- de imaginación que de dinero. Poder sin imaginación diputacional. Menuda generosidad y hasta esplendidez de nuestra primera institución provincial para con el próximo Festival de Luchas Celtas de La Pola. Nada menos que seis kilos de los de antes, con lo precisada que está la Lucha leonesa de infraestructuras básicas, como soporte para el desarrollo. ¿Los jerarcas diputacionales, o sus asesores deportivos, tendrán la misma idea de las luchas folklóricas que el balonmanista Juanín? Imagínense la capacidad de convocatoria deportiva de un festival folclórico de este tipo... tan generosamente (¿políticamente?) subvencionado.

tracking