Madrid y Barça se juegan el título

El Real Madrid vuelve a la final de la Copa del Rey, igual que hace dos años en Zaragoza -donde perdió con el Unicaja- y lo mismo que cuatro antes, cuando también se enfrentó al Barcelona en Málaga, que despidió al Tau Vitoria tras un vibrante partido entre los dos mandamases de la ACB. El Madrid reunía dos condiciones: líder de la Liga ACB y, aunque las previsiones de esta edición se han matizado hasta la saciedad, si algún equipo partía con el cartel de favorito, ese era el blanco. Sin duda, el bloque que mejor llegaba a la Copa. Su baloncesto le ha dado grandes resultados en el campeonato liguero, donde presenta los mejores números en dieciocho años (18-2), también presume de ser el mejor anotador de la ACB, eso sí, seguido por los vascos, que cargaban con el sambenito de defender título, otra de las normas de mal fario. Pero los vascos partieron con un 7-0 (m.4) y el Madrid necesitó casi cinco minutos para inaugurar su casillero en el marcador. La iniciativa cayó en manos de los hombres dirigidos por el croata Velimir Perasovic liderados, cómo no, por el hispano-argentino Luis Scola. Los blancos no pudieron jugar como acostumbran en todo el primer tiempo (42-34). El Madrid, por fin, después de seis cuartos, funcionaba igual que en la Liga. A los blancos se les despejaba el camino. Mucho más con la eliminación por faltas de Scola (m.39). Y se les terminó de despejar con otro par tiros libres de Sekulic. Los blancos, líderes de la Liga, vuelven a la final en Málaga, donde también la disputaron hace seis años.