Balonmano | Recopa de Europa
Ilusión pero también recelo
El Ademar pone el pie en Zagreb para disputar unas semifinales que el equipo afronta con mucho anhelo pero también con sus picacia por el ambiente infernal y unos árbitros dudosos
Tras otra maratoniana sesión de avión y autobús -once horas- el Ademar puso pie en la tarde de ayer en Zagreb, la capital croata donde el prócimo domingo, a partir de las cinco de la tarde se jugará buena parte de sus posibilidades de estar en una nueva final de la Recopa de Europa. Al menos, el hotel de concoentración se encuentra a escasos cien metros del pabellón, el temido Dom Sportova, donde los jugadores de Cadens se verán las caras con el RK Zagreb. Algo de agradecer si se tiene en cuenta los miles de kilómetros que llevan los leoneses a sus espaldas en las últimas semanas. Todo un tour que comenzaba con el viaje de locura a Dinamarca en pleno temporal de nieve, continuaba en Barcelona prácticamente nada más regresar, proseguía luego con la disputa de la Copa del Rey en Altea y escribía su penúltimo capítulo con otro viaje matador a Almería. Con razón jugadores como Saric comentaban ayer que empezaban a odiar los autobuses y los aviones. «Preferiría entrenar durante once horas que un viaje», comentaba de formae expresiva el meta bosnio, un jugador llamado a ser determinante en el encuentro de mañana. Por lo demás, la expedición leonesa ha llegado a Zagreb con una mezcla de ilusión y recelo. Ilusión porque a nadie se le escapa que un buen resultado en el Dom Sportova dejaría la eliminatoria muy encarrilada para el partido de vuelta en León dentro de una semana. Y también recelo porque todo el mundo sabe que jugarse unas semifinales con un equipo balcánico y en su casa trae aparejados unos condicionantes como poco preocupantes. «Me preocupan los árbitros lituanos y las «migas»que pueda hacer con ellos el presidente del Rk Zagreb, Bartol Chalet», apuntó Saric en este sentido. Su compañero, el otro portero del equipo, el croata Mirko Alilovic, corroboraba estos mismo temores. «Seguro que el presidente y el director deportivo se están trabajando a los árbitros para que luego piten así», dijo Alilovic mientras se colocaba gráficamente una mano sobre los ojos. En todo caso, los jugadores del Ademar son conscientes de que el partido será muy abierto. «Ellos nos quieren pasar la presión a nosotros diciendo que somos favoritos, pero yo veo el partico complicado. Creo que esto va a estar al cincuenta por ciento». El Ademar realizará en la tarde de hoy una sesión de entrenamiento para aclimatarse a la pista donde jugará el partido el domingo y lo hará a la misma hora: las cinco.