Fútbol | Primera División
El Villarreal agradece la mala puntería exhibida por el Barça
Los de Rijkaard fallaron en exceso en la primera parte y lo pagaron con otra derrota
El Barça se metió en un serio problema por culpa de su falta de acierto que le costó sumar una dolorosa derrota ante el Villarreal. Los azulgrana acumularon un sinfín de ocasiones en la primera mitad que malograron de forma clamorosa ante un rival que aprovechó la suyas a la perfección, para apretar una Liga que vivirá una locura en sus últimas siete jornadas. A los catalanes les vino en principio bien oler el aliento de sus rivales en el cogote. Esa presión les sirvió para concentrarse en un partido vital en un escenario complejo para sus intereses. Los azulgrana arrancaron con una medida ambición ejemplificada en el regreso de un Ronaldinho recuperado para la causa. El brasileño transmitía su innegable clase acompañada de una brega desconocida. El líder de la Liga no quería perder ni un ápice de su ventaja tras conocer las victorias de sus inmediatos perseguidores. Pero enfrente se encontró a un buen equipo. Un conjunto que sabe manejar con criterio el esférico a pesar de que las lesiones han lastrado su temporada. El Villarreal respondió con idéntico arrojo. El cruce de buenas intenciones, alejadas de cinismos defensivos, propició un duelo repleto de lujos. El Barça desplegó un arsenal de muchos quilates propiciado por la movilidad de su trío atacante acompañado por el privilegiado cerebro de Xavi. Los azulgrana sumaron numerosas ocasiones en la primera mitad pero ninguna acabó en gol. El Villarreal reanudó el partido mejor posicionado sobre el terreno de juego, con un gran trabajo de recuperación de Senna y Josico, lo que le permitió controlar más al Barcelona y poder salir al contragolpe con más peligro. A los diez minutos, esta nueva situación del encuentro quedó reflejada en el marcador, cuando Pires aprovechó un gran servicio de Cani para batir a Valdés en su salida. El gol espoleó aún más al Villarreal que durante unos minutos tuvo al Barcelona contra las cuerdas, tras un buen disparo de Cani y una gran jugada de Marcos y Forlán que pudo suponer el segundo tanto local. El Barça afrontaba el último cuarto de partido con la urgencia de puntuar pero apenas inquietaba la portería del Villarreal, por lo que Rijkaard decidió retirar a un defensa para dar entrada al islandés Eidur Gudjohnsen. Y la puntilla le llegó al líder a seis minutos de final con un gran gol de Marcos.