Nadal barre a Federer en tierra

En Montecarlo volvió a sonar el himno nacional español en honor de Rafael Nadal, flamante ganador del Masters Series por tercer año consecutivo. La verdad es que literalmente borró de la pista a un Roger Federer por completo desconocido, con abundancia de errores no forzados a lo largo del partido en el que el mallorquín se impuso por 6-4 y 6-4 en una hora y 35 minutos. Para cerrar el encuentro, el de Basilea cometió otro imperdonable fallo con su tiro de revés excesivamente largo. Mientras Nadal recibió como recompensa a su victoria 340.000 euros, el suizo obtuvo 170.000. Fue la séptima final entre los dos jugadores, cinco de las cuales se ha anotado el balear por dos victorias de su oponente, en Miami 2005 y en Wimbledon 2006. ¿Qué le ocurrió a Federer en este partido de Montecarlo? Sencillamente, se vio atenazado por la presión que sobre él ejerció un Nadal en vena de aciertos. Fue un contraste sorprendente: tenis de acusada profundidad y colocación de golpes por parte del de Manacor y fallos a veces incomprensibles en lo que concierne al actual líder mundial. Federer defraudó y Nadal, por el contrario, encandiló con su juego de tendencia atosigante, utilizando al máximo el efecto liftado para provocar el error de su contrario. Fue, por otra parte, la primera final del año entre los dos primeros jugadores del mundo. Federer, que este año perdió dos veces con Guillermo Cañas, puso de manifiesto sus carencias para el juego sobre tierra batida. Le cuesta demasiado entrar en el partido cuando su enemigo carga tintas sobre las líneas de fondo o las laterales. Aunque se presumía un partido bastante abierto, el caso es que se tornó favorable al español, cuyo tono de rendimiento hizo recordar al exitoso Nadal de hace un par de años. «Desconcertado» «Roger empezó fuerte y aguanté lo que pude al principio, intentando por mi parte la estabilidad en el juego», declaró Nadal. «Federer cometió demasiados errores, algo que no es normal en él; incluso por momentos le vi algo desconcentrado y eso me impulsó a sacar el máximo provecho de la situación», añadió un Nadal convencido de que vuelve a la mejor línea para seguir defendiendo los puntos de la pasada temporada, continuando esta semana en el Trofeo Conde de Godó.