A luchar

MEJOR DE lo que se presumía en los primeros compases del partido, pero peor de lo que pudo ser, con apenas dos goles de ventaja para los teutones, cuando el encuentro abría definitivamente las puertas de su solución. Cuatro goles de diferencia, dos menos de los que hubo que remontar en el épico partido ante el Zagreb¿ La resolución favorable es difícil, pero posible. Al margen calidades y cualidades técnicas se impone la lucha, la garra, la entrega, la fe y, muy particularmente, el apoyo total, sin desmayo, de los aficionados ejerciendo de decisivo jugador número ocho. De principio a fin, sin bajar en momento alguno ánimo, ilusión, entusiasmo y ambición. Sólo así lo difícil dará paso a lo posible, y Ademar podrá contar con un tercer título de la Recopa en sus vitrinas, en esta temporada tan emotiva, importante mirando al futuro. Temporada del cincuentenario, temporada con despedidas que abren un interrogante cara al futuro. Confieso que, repitiendo las imágenes del partido, doy por bueno el resultado. El rival era y es de primerísima fila, uno de los mejores equipos europeos que, en balonmano, es tanto como decir uno de los mejores equipos mundiales. A la altura del Flensburg y del Kiel; un trío que impone de momento la supremacía alemana sobre la que venía siendo supremacía española en los últimos tiempos. Hubo momentos en que parecía que los alemanes del Hamburgo rompían el partido y se marchaban marcando distancias en el marcador; pero Ademar, haciendo la goma (aludiendo al dicho ciclista) se recuperaba. Incluso estuvo a dos goles de diferencia en ocasiones, mínima ventaja que hubiera abierto de par en par la puerta de la esperanza, esa puerta que ahora queda entreabierta. Sobre la base de una defensa segura, fuerte, edificar el edificio de la victoria precisa del uso del arma que tantos triunfos ha dado al Ademar, el contraataque. Fuerza atrás y velocidad para sorprender al contrario. La jornada dejó un balance positivo para la Cultural y para Baloncesto León, en sendos partidos jugados agónicamente para lograr dos buenos resultados. Climalia León ante el Drac Inca, con dos prórrogas de esas que ponen los nervios a prueba; la Cultural firmando un empate, que suma un valioso punto, en Zamora; con un solo pero que oponer: el de las exclusiones de jugadores afectados por la fiebre tarjetera, mal crónico del equipo que tendrá que afrontar, con bajas abundantes e importantes, la próxima cita en el Nuevo Amilivia.