Aranzana: «Los once que tengo en el vestuario son los mejores del mundo»
El entrenador de Baloncesto León, Gustavo Aranzana, manifiesta con relación al primer partido de mañana ante el Palma: «Hay que estar preparado, que lo estamos, estar tranquilos y no cargarnos más de presión. Hemos hecho la rutina habitual que hacemos de cada semana, porque esto es una competición de un mes que esperemos tenga continuidad tras esta primera eliminatoria, y hay que estar preparados para jugar diez partidos». El técnico del equipo leonés señala con respecto al estado de la plantilla para afrontar el primer partido de play off de ascenso: «Anima ver las caras de los jugadores, su seguridad y su confianza para afrontar estos partidos de la temporada». Aranzana piensa que hay posibilidades de pasar esta primera eliminatoria, aunque precisa que hay que ir partido a partido. Señala: «León tiene un buen equipo, y si hacemos lo que nos ha llevado a ganar la Copa y ser segundos de la Liga tendremos nuestras opciones». El concurso de Lou Roe en el equipo rival lo considera a tener en cuenta, pero sin olvidarse del resto del equipo: «Es un jugador con un talento tremendo, que ha hecho que el Palma anote más de 90 puntos por partido», precisó Aranzana, que cree que sus hombres deben «bajar su torrente anotador para que el tanteo quede por debajo de los 70 puntos, aunque será complicado». Gustavo Aranzana precisa otra de las facetas del juego que hay que tener en cuenta para frenar al Palma: «Hay que evitar que corran e intentar hacerles sufrir en el rebote y, a partir de ahí, luego los partidos se definirán en pequeños detalles de concentración y pérdidas de balón o el acierto desde la línea de tiros libres. Tenemos que estar muy atentos a las diferentes opciones que se puedan dar en el juego». El entrenador reconoce: «Llegamos con los deberes bien hechos. Tengo buenas vibraciones, porque el equipo está bien. No hemos dejado nada al azar. Lo que me da esa sensación es la cara alegre del equipo». Aranzana confía a muerte en su plantilla: «Con lo que tengo estoy contentísimo y vamos a pelear a muerte. Los once que tengo en el vestuario son los mejores del mundo».