DESDE LA GRADA
Equipo
E DE esfuerzo y de empeño; Q de química y de querer; U de unión y de Ulises; I de incansables y de ilusión; P de palacete y de publico; O de orgullo y de objetivo. Equipo. Esta palabra es la clave y éste es el camino que nos condujo hacia la victoria el jueves en el primer partido del play off. Creo que en este encuentro se pudo ver lo importante que son todos los jugadores si estos ponen sus cualidades al servicio del equipo. Hoy empezaremos por el banquillo. Qué importante ha sido el trabajo de los que han salido desde el banco y que todos aporten y sumen. Lucho sale y rebotea, da buenos pases y tiene la escopeta lista para ayudar. El bueno de Dumas da continuidad al buen trabajo de Juanjo Bernabé, a su corazón y a su dirección. Y Dani García, gracias a su importante experiencia, sabe lo que necesita el equipo. Y como no, el guerrero Urko Otegui, que saca a la cancha esa chispa que necesita el motor para que se produzca el movimiento de la grada. Luego Leather, que le pone tantas ganas que le cuesta controlar su fuerza. Y ya la fiesta la ponen tanto Jorge Calvo como Fran Baquer. No, no me olvido del fabuloso trabajo de Bufoni y de Paolo Quinteros, que se han puesto el mono de trabajo y han defendido muy, pero que muy bien. Bueno, como Peterson que desde la llegada de Rick Hughes su aportación ha ido a más, y se le ve mucho más comprometido en todo. Además tanto Bernabé como Rick buscan siempre la forma de hacer mejores a sus compañeros y esta complicidad da como resultado partidos como el del jueves. Quiero resaltar también el trabajo del cuadro técnico, esos que son como el perejil, el ajo o el aceite en cualquier buena comida y que necesita de un buen vino que dé cuerpo y color al manjar. Y estos son los que más ayudan para que nuestros jugadores lleguen en las mejores condiciones al partido. Pero mira, hasta en esto los jugadores son agradecidos y tienen ese gesto de complicidad con sus compañeros del cuadro técnico. ¿Cómo? Pues tirándose por esos balones o cogiendo esos balones sueltos del partido. Ese es el mejor ejemplo de compromiso y de la buena química existente en el grupo que tiene este año nuestro equipo. Ah , oye, lo que me gustaría, es que alguien me diga como es posible conseguir siete años seguidos estar en los play-off, después de lo duro que es un descenso. Cómo sigue llegando ese milagro de hacer año tras año un equipo competitivo con poco presupuesto, con mil y un problemas, con cambios año tras año y con la desilusión de no conseguir el ascenso, para tener otro año a la ciudad de León comprometida con su equipo. Los que conocemos el duro deporte de la canasta tenemos que agradecer el mérito que esto supone. Creo que no hace falta decir su nombre pero algún día nos dirá como lo hace. Bueno no quiero acabar por hoy sin decir que me gustó mucho el público del palacete, pues sin estar lleno los que fueron sabían a lo que iban y empujaron y tiraron del carro como si se hubieran llenado dos campos. Esa es la buena afición, la que nunca abandona a su equipo, ni en los malos momentos: enhorabuena afición y hoy, sábado, volvamos al Palacio de Deportes con esa garra y ese grito de ¡Leon, ánimo afición!.