El Toralín debe empujar hoy más que nunca

La situación en la que ambos equipos llegan a la contienda fijada para las 18 horas en el feudo blanquiazul puede y debe servir de pretexto para que el coliseo ponferradino se quede pequeño. La victoria de Tenerife ha devuelto la ilusión a una grada que se temía lo peor después del empate ante el Vecindario, por lo que su concurso resultará esencial esta tarde para que los tres puntos se queden en casa. Si cabe, todavía es mayor el aliciente de medirse a un rival superior sobre el papel que además lo tiene todo preparado para celebrar una fiesta por todo lo alto con la que conmemorar su ascenso a Primera. Para eso deberán pasar por encima de un equipo que saldrá mentalizado de lo mucho que se juega y tendrán que luchar contra una afición que se rebela contra unos números que siguen siendo adversos. A poco que los jugadores locales sepan motivar al respetable, seguro que los de Lucas Alcaraz van a tener complicada su misión de puntuar al menos para garantizar su pase a la máxima categoría hoy.